El Ejército israelí informó este sábado que sigue "luchando bajo tierra y en la superficie" en el barrio de Shujaiya, en la ciudad norteña de Gaza, tres días después del inicio de esta operación. Además, lanzó nuevos ataques aéreos en el centro y sur del enclave palestino.
“Durante el último día, en Shujaiya las tropas eliminaron a un gran número de terroristas y localizaron una instalación de almacenamiento de armas dentro de un recinto escolar de la zona”, indicaron en un comunicado.
La agencia palestina de noticias Wafa reportó que los ataques aéreos israelíes fueron intensos desde la mañana del sábado y que la artillería alcanzó viviendas en Shujaiya.
Fuentes médicas palestinas confirmaron la muerte de cuatro civiles, incluidos dos niños, y decenas de heridos, trasladados al hospital árabe Al Ahli de ciudad Gaza para recibir tratamiento, por un bombardeo israelí contra una casa en el centro de la ciudad.
Los equipos de Defensa Civil rescataron cuatro cuerpos y seis heridos por otro ataque israelí contra un apartamento residencial en la zona de Sadra, también en ciudad de Gaza.
Además, varios civiles resultaron heridos en otro ataque aéreo contra el campo de refugiados de Al Maghazi en el centro de Gaza.
Las fuerzas israelíes también abrieron fuego con ametralladoras contra las tiendas de campaña de los desplazados en Shakoush y el barrio de Tel al Sultan en Rafah, en el sur de la Franja, según Wafa.
El área de Al Mawasi, designada como zona humanitaria por Israel, fue nuevamente objetivo de la artillería israelí, que atacó refugios improvisados e invernaderos agrícolas, dejando múltiples víctimas, informaron fuentes médicas palestinas.
Las fuerzas israelíes aseguraron en su comunicado que sus ataques en la ciudad fronteriza con Egipto están basados en información de su inteligencia y que en la última jornada mataron a "numerosos" combatientes y desmantelaron "una gran cantidad de infraestructura, incluidos túneles".
En casi nueve meses de guerra, la ofensiva israelí ha dejado más de 37,700 personas muertas, en su mayoría mujeres y niños, y otras 86,429 heridas; además de escuelas, hospitales y edificios residenciales arrasados.