Los fuertes vientos y lluvias de la tormenta tropical Beryl causaron la muerte de al menos tres personas en el sureste de Texas el lunes.

La tormenta también provocó el cierre de puertos petroleros, la suspensión de unos 1,000 vuelos y dejó sin electricidad a más de 2 millones de hogares y negocios.

Beryl, el primer huracán de categoría 5 de la temporada, se debilitó después de impactar la ciudad costera de Matagorda, Texas.

Generó peligrosas marejadas ciclónicas e intensas lluvias antes de atravesar Houston, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH).

La tormenta, que se espera se debilite rápidamente a medida que avanza hacia el interior del estado, recorrió un camino destructivo por Jamaica, Granada y San Vicente y las Granadinas la semana pasada, dejando al menos 13 muertos en el Caribe y Texas.

En el área de Houston, un hombre de 53 años y una mujer de 74 fallecieron debido a la caída de árboles sobre sus casas, y una tercera persona se ahogó, según funcionarios del condado de Harris.

La actividad de refinación de petróleo se desaceleró y algunos sitios de producción fueron evacuados en Texas, el mayor productor de petróleo y gas natural de Estados Unidos.

“La marejada ciclónica y las fuertes lluvias están amenazando la vida de algunas zonas de Texas. Los vientos dañinos continúan a lo largo de la costa, con fuertes vientos moviéndose hacia el interior”, dijo el CNH.

Los residentes se apresuraron a tapiar ventanas y abastecerse de suministros esenciales ante las advertencias de que la tormenta podría ser mortal. Imágenes de televisión mostraron ráfagas y lluvias torrenciales azotando ciudades como Lake Jackson, Galveston, Sargent y Freeport.

En Houston, varios árboles caídos bloquearon carreteras mientras la tormenta pasaba, dejando intransitables los carriles de las principales autopistas. En un video, trabajadores rescataron a un hombre atrapado en un camión en una autopista inundada.

El alcalde de Houston, John Whitmire, instó a los ciudadanos a refugiarse, destacando que las inundaciones superaron los 25 centímetros en gran parte de la ciudad.

Beryl se fortaleció hasta convertirse en un huracán de categoría 1 mientras cruzaba las cálidas aguas del Golfo de México antes de tocar tierra, pero el CNH espera que se debilite rápidamente. La tormenta avanzará sobre las partes orientales del estado antes de moverse hacia el valle del Bajo Mississippi y el valle de Ohio el martes y miércoles, añadió el CNH.

Las escuelas cerraron y las aerolíneas cancelaron más de 1,300 vuelos. Las autoridades ordenaron evacuaciones en ciudades costeras y al menos 300,000 hogares y negocios en Texas se quedaron sin electricidad, según PowerOutage.us.

El cierre de los principales puertos petroleros en Corpus Christi, Galveston y Houston podría interrumpir las exportaciones de crudo y los envíos a las refinerías. Productores de petróleo como Shell y Chevron evacuaron a su personal de las plataformas en el Golfo de México antes de la tormenta.