Este lunes, una jueza estadounidense de Florida desestimó la causa penal contra Donald Trump, acusado de retener ilegalmente documentos clasificados tras dejar el cargo. Esta decisión representa una importante victoria legal para el expresidente republicano, quien busca regresar a la Casa Blanca.
La jueza federal de distrito Aileen Cannon, nombrada por Trump, dictaminó que el fiscal especial Jack Smith, encargado de la acusación, fue nombrado ilegalmente y no tenía autoridad para llevar el caso.
Esta resolución llega dos días después de que Trump fuera víctima de un intento de asesinato durante un mitin en Pensilvania. Trump será nombrado formalmente candidato presidencial republicano esta semana en Milwaukee, desafiando al presidente demócrata Joe Biden en las elecciones del 5 de noviembre.
Es probable que los fiscales apelen la sentencia, dado que en otros casos, los tribunales han confirmado la autoridad del Departamento de Justicia para nombrar fiscales especiales en investigaciones políticamente sensibles.
Un portavoz de Smith no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios. Mientras tanto, el fallo de Cannon pone en duda el futuro del caso. Smith también está procesando a Trump en Washington por cargos relacionados con los intentos de anular las elecciones de 2020.
En el caso de los documentos, Trump fue acusado de retener deliberadamente material sensible de seguridad nacional en su finca de Mar-a-Lago tras dejar el cargo en 2021, y de obstruir los esfuerzos del Gobierno para recuperarlo.