El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este lunes un intento de golpe de Estado "de carácter fascista" en respuesta a los cuestionamientos sobre su reelección, anunciada el domingo por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
La reelección de Maduro ha sido rechazada por la oposición mayoritaria y gran parte de la comunidad internacional.
Durante su acto de proclamación como mandatario reelecto, Maduro celebró lo que calificó como una "proeza" por haber vencido al fascismo en las elecciones del domingo, donde obtuvo el 51.2% de los votos según el CNE.
Este resultado ha sido rechazado por la oposición y varios países.
“Vencer al fascismo, a los demonios, a las demonias, es una proeza histórica y nuestro pueblo lo ha hecho, otra vez lo volvió a hacer nuestro pueblo”, expresó Maduro al recibir la credencial del presidente del CNE, Elvis Amoroso.
Maduro destacó que las votaciones, con una participación del 59%, representaron una jornada histórica. Afirmó recibir el resultado con humildad, calificándose como un "hombre de a pie".
“Se dio la batalla definitiva contra el fascismo en esta tierra y le ganamos”, añadió el líder chavista.
Para su tercer mandato, Maduro se comprometió a hacer "irreversible la paz, la igualdad, la independencia nacional" y a llevar al país hacia "la paz y la prosperidad, a la unión nacional a través del diálogo".
A pesar de las denuncias de la oposición, que asegura que faltan auditorías electorales, Maduro fue proclamado formalmente. La mayor coalición antichavista, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), sostiene que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó los comicios con amplio margen.
González Urrutia denunció violaciones a las normas electorales, incluyendo la negativa del CNE de entregar las actas de totalización de votos en más del 50% de los centros electorales.