En un mensaje nocturno del lunes, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, anunció que la incursión militar ucraniana en la región de Kursk ha permitido el control de aproximadamente 1,250 kilómetros cuadrados y casi 100 poblaciones en territorio ruso.
Zelenski detalló que las fuerzas ucranianas siguen avanzando en las áreas asignadas, manteniendo el control de 92 asentamientos.
Durante una reunión con diplomáticos ucranianos en Dnipró, el presidente destacó que la operación ha sido exitosa, subrayando la importancia de reforzar las posiciones y estabilizar las zonas ganadas.
El presidente también mencionó que la operación en Kursk sería innecesaria si los aliados internacionales de Ucrania levantaran las restricciones sobre el uso de armas de largo alcance contra Rusia.
Según Zelenski, la incredulidad sobre la viabilidad de esta incursión y la concepción de “líneas rojas” en la estrategia militar han demostrado ser erróneas.
Zelenski instó a los diplomáticos a persuadir a Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania para que permitan el uso de armas de largo alcance contra objetivos militares en Rusia.
Enfatizó que la falta de apoyo en este aspecto se convierte en un obstáculo significativo para el avance ucraniano y el enfrentamiento con las fuerzas rusas.
Finalmente, Zelenski argumentó que la reacción de Putin ante la incursión en Kursk demuestra que no hay razones válidas para no permitir que Ucrania utilice todo su potencial militar contra objetivos estratégicos en Rusia.