El fiscal del condado de Los Ángeles, George Gascón, anunció en una conferencia de prensa que propondrá al tribunal que se revise la sentencia de los hermanos Lyle y Erick Menéndez, condenados por el asesinato de sus padres, Kitty y José Menéndez, en 1989.
Durante su juicio a inicios de la década de 1990, los hermanos revelaron que habían sido víctimas de abusos físicos, verbales, psicológicos y sexuales a manos de sus padres.
Los crímenes ocurrieron cuando dispararon 13 veces con escopetas a sus padres mientras estos miraban televisión en su hogar de Beverly Hills. La defensa sostuvo que los jóvenes, de 21 y 18 años en ese momento, actuaron por miedo.
En contraste, la fiscalía argumentó que Lyle y Erick habían planificado los asesinatos para obtener la herencia de Kitty y José, siendo este último un destacado ejecutivo de RCA Records. Como resultado, los hermanos fueron hallados culpables y condenados a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
“Creo que los hermanos estaban sujetos a una enorme cantidad de disfunción en su hogar y abusos sexuales”, señaló es fiscal Gascón el jueves 24 de octubre durante la conferencia.
Recientemente, ha surgido una carta de Erick, supuestamente escrita en 1988, en la que detalla los abusos sufridos por su padre.
También se ha presentado otra posible evidencia: un joven que formó parte de la agrupación puertorriqueña “Menudo”, quien afirma haber sido drogado y violado por José Menéndez en su hogar en la década de 1980, cuando era menor de edad.
“En este caso en particular es que vamos a recomendar al tribunal que se elimine la cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional y que se los condene por asesinato, que, debido a que hay dos asesinatos involucrados, será de 50 años a cadena perpetua. Sin embargo, debido a su edad según la ley, ya que tenían menos de 26 años en el momento en que ocurrieron estos delitos, serán elegibles para la libertad condicional de inmediato”, explicó Gascón.
El fiscal planea presentar su recomendación este viernes ante el tribunal, donde se llevará a cabo una audiencia en un periodo de 30 a 45 días para que el juez escuche los argumentos y determine el futuro de los hermanos Menéndez.