El presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció un nuevo ejercicio de entrenamiento nuclear estratégico, en el cual se revisará el control de lanzamientos de misiles balísticos y de crucero nucleares.
"Hoy llevamos a cabo otro ejercicio de las fuerzas de disuasión estratégica", dijo Putin en un video difundido por el Kremlin.
"Elaboraremos las acciones de los funcionarios para controlar el uso de armas nucleares con lanzamientos prácticos de misiles balísticos y de crucero", señaló.
Putin subrayó que, aunque Rusia no pretende entrar en una carrera armamentista, Moscú debe mantener listas sus fuerzas nucleares.
Durante el ejercicio, se lanzó un misil Yars desde el cosmódromo de Plesetsk hasta el polígono de Kura en Kamchatka, cubriendo unos 6,000 kilómetros.
Misiles Bulavá y Sineva también fueron lanzados desde submarinos atómicos en los mares de Ojotsk y Barents, respectivamente.
El presidente ruso destacó la importancia de la tríada nuclear, compuesta por misiles intercontinentales, submarinos atómicos y aviación estratégica, calificándola como un "garante fiable de la soberanía y seguridad de nuestro país".
En julio, Rusia realizó maniobras nucleares tácticas con Bielorrusia, empleando misiles Iskander-M.
Recientemente, Putin planteó cambios en la doctrina nuclear, que ahora contempla el uso de armas nucleares ante un ataque convencional que amenace la soberanía de Rusia y Bielorrusia.
Las negociaciones con Estados Unidos para renovar el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (Start), que expira en 2026, permanecen estancadas. Este es el último tratado de desarme estratégico vigente entre ambas potencias.