El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, está listo para declarar una “emergencia nacional” y desplegar fuerzas militares para combatir la inmigración ilegal, según un informe del activista conservador Tom Fitton.
La información fue confirmada por el mismo Trump, quien avaló el reporte en su cuenta de la red social Truth Social, destacando que su plan de deportación masiva está listo para ser implementado por su próxima administración.
Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, había anticipado que el presidente entrante se disponía a usar el ejército y recursos federales para revertir lo que considera una "invasión" causada por las políticas migratorias del gobierno de Joe Biden. Trump, en una breve declaración, respaldó este plan con un simple "Es verdad".
De acuerdo con informes previos de CNN, este programa incluiría la construcción y expansión de centros de detención en zonas cercanas a la frontera con México.
Estos centros estarían destinados a alojar a inmigrantes detenidos, quienes serían deportados bajo una política de detenciones obligatorias.
Para ello, el gobierno de Trump necesitaría utilizar fondos obtenidos mediante la declaración de emergencia y la cooperación de agencias como el Departamento de Seguridad Nacional.
Los centros de detención masiva serían operados con apoyo de prisiones de condado y contarían con instalaciones básicas, como catres y colchonetas, para alojar a los inmigrantes hasta su expulsión.
Esta medida se busca implementar rápidamente, ya que el plan de deportación requiere de recursos adicionales y la capacidad de mantener a los detenidos hasta su deportación, evitando que sean liberados por falta de espacio y recursos.
Trump ya había utilizado una estrategia similar durante su primer mandato, recurriendo a la declaración de emergencia para obtener fondos militares destinados a construir un muro en la frontera con México.
Este nuevo plan, basado en la seguridad nacional, se perfila como una de las medidas clave de su presidencia entrante para enfrentar lo que considera una crisis migratoria.