El gobierno de Grecia ha declarado el estado de emergencia en la isla de Ánafe, en el archipiélago de las Cícladas, debido a la intensa actividad sísmica que afecta la región desde hace tres semanas, informó este viernes el diario Efsyn.
Protección Civil mantendrá la medida vigente al menos hasta el 13 de marzo en esta isla, que cuenta con unos 300 habitantes. Anteriormente, el gobierno había declarado la emergencia en Santorini, el 6 de febrero, y en Amorgos, el 12 de febrero.
Desde el 24 de enero, decenas de sismos se han registrado en la zona marítima entre estas islas. Aunque este viernes no se han reportado movimientos mayores a magnitud 4, el terremoto más fuerte ocurrió el pasado lunes con una magnitud de 5.3, a unos 20 kilómetros al suroeste de Amorgos, según el Instituto Geodinámico de Atenas.
Entre el 26 de enero y el 8 de febrero, se han contabilizado más de 12,800 temblores.
Las escuelas en Santorini, Amorgos, Ánafe y la cercana isla de Ios permanecen cerradas desde hace dos semanas. En Santorini, uno de los destinos turísticos más importantes del país, solo quedan alrededor de 4,000 residentes, ya que miles han abandonado la isla por temor a nuevos sismos.
El director del Instituto Geodinámico de Atenas, Vasilis Karastathis, afirmó este viernes en la emisora pública ERT que se observa una “estabilidad de la evolución de sismicidad”, aunque aclaró que esto no implica necesariamente una desescalada del fenómeno.
“Este descenso debería permanecer unas semanas más para poder hablar con seguridad de desescalada”, explicó.
Por su parte, el sismólogo Gerasimos Papadópulos advirtió en el diario Efsyn que esta “relativa calma” podría ser un presagio de un terremoto de mayor magnitud.
El exdirector del Instituto Geodinámico, Akis Tselentis, mencionó en Facebook que el “escenario optimista” sería un terremoto de magnitud 6, aunque existe una baja probabilidad de que ocurra un sismo de magnitud 7, lo que podría generar un tsunami y causar graves daños.
Tselentis también denunció que en Santorini se han cometido “flagrantes ilegalidades” con la construcción de hoteles y apartamentos de lujo al borde de la caldera volcánica. Incluso, señaló que en algunos casos la caldera ha sido excavada para construir edificaciones, y compartió en Facebook una fotografía de una obra abandonada tras el inicio de los sismos.
Los expertos indican que los temblores están relacionados con el movimiento de placas tectónicas en la falla submarina de Ánydros, ubicada entre Santorini y Amorgos, y no con los volcanes de la zona. Sin embargo, advierten que la actividad sísmica podría reactivar el vulcanismo en la región.