Israel ha liberado a cientos de prisioneros palestinos, mientras que el grupo armado Hamás ha entregado los cuerpos de cuatro rehenes israelíes, en lo que constituye el último intercambio acordado en el marco de una frágil tregua en Gaza.
El alto el fuego, que entró en vigor el 19 de enero, se ha mantenido de forma mayoritaria, pese a diversos contratiempos. No obstante, la primera fase de la tregua finalizará esta semana y, aunque se planea una segunda fase que buscaría poner fin a la guerra, el futuro de este acuerdo sigue siendo incierto. Hamás ha señalado que, hasta el momento, no ha recibido ninguna propuesta formal para avanzar en las negociaciones.
Después de varios días de estancamiento, mediadores egipcios lograron que Hamás entregara los cuerpos de cuatro rehenes israelíes, correspondientes al acuerdo de la primera fase, que incluyó la liberación de 620 palestinos detenidos por las fuerzas israelíes en Gaza o encarcelados en Israel.
Los cuerpos fueron entregados a la Cruz Roja, según informó una fuente de seguridad israelí. Los rehenes identificados fueron Tsachi Idan, Itzhak Elgarat, Ohad Yahalomi y Shlomo Mantzur.
En cuanto a los presos palestinos liberados, se encuentran 445 hombres, 24 mujeres y menores detenidos en Gaza, así como 151 prisioneros que cumplen penas de cadena perpetua por atentados mortales contra israelíes, según indicó una fuente de Hamás.
Algunos de los liberados fueron vistos saliendo de una prisión israelí en Cisjordania, y se espera que sean recibidos en un hospital de Gaza.
La primera fase del alto el fuego incluyó el intercambio de 33 rehenes israelíes por unos 2.000 prisioneros palestinos, además de la retirada de tropas israelíes de algunas zonas de Gaza y la entrada de ayuda humanitaria.
Sin embargo, dado que la tregua de 42 días concluye el sábado, no está claro si se alcanzará un acuerdo para una prórroga. Esto podría abrir la posibilidad de liberar a más de los 59 rehenes israelíes restantes, además de iniciar las negociaciones para una segunda fase del acuerdo.