Es la segunda persona sepultada que encuentran en esta propiedad, utilizada como casa de seguridad y panteón clandestino.
La persistencia de la familia de la víctima, que buscó por más de 30 días a Luis Alberto Popoca Hernández, ayudó a que encontraran su cuerpo en la calle Las Joyas, de la referida colonia.
Los parientes de Popoca Hernández, tenían el presentimiento que éste había sido enterrado en un inmueble baldío, por lo que comenzaron a escarbar hasta que vieron una pierna, así que dieron aviso a las autoridades.
La tarde del lunes, llegaron agentes municipales, policías estatales y personal de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) para corroborar el hecho.
El personal del Servicio Médico Forense (Semefo) se dio cuenta que se trataba de un sujeto embolsado y desmembrado, por lo cual procedió a realizar el levantamiento del cadáver de Luis Alberto Popoca Hernández de 25 años de edad, operador de un radio taxi, con domicilio en la colonia Lomas de Guadalupe del municipio de Temixco.
De acuerdo con los resultados de la necropsia, Luis Alberto murió por estrangulamiento.
El primer hallazgo de un cuerpo en dicho lugar, se realizó el pasado 30 de marzo del año en curso, tras una persecución que realizaron agentes de Temixco contra un grupo armado; el cual lesionó a tiros al director de Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), Luis Felipe Martínez y a su esposa María Angélica, directora de capacitación de la Cruz Roja, cuando viajaban en su camioneta Ecosport, color gris, con placas de circulación PXG-1780 del estado de Morelos, en la colonia Lomas del Carril, donde hallaron esta casa de seguridad, en la colonia Ajonjolinar.
Dentro de la vivienda estaba una fémina de nombre Alicia Orihuela de 42 años de edad, golpeada y amarrada, la cual fue rescatada; además en el patio estaba un sujeto semi-enterrado de nombre Benjamín Rojas López de 46 años de edad.
En aquella ocasión, los delincuentes que tenían privada de la libertad a la mujer y responsables de estos dos homicidios, escaparon de la justicia.
