Fue cerca de las 9:00 horas cuando el comerciante observó, junto a su domicilio, un auto estacionado con al menos tres sujetos sospechosos que ya lo esperaban.
Ante ello, el hombre trató de salir por la parte trasera del inmueble pero los supuestos delincuentes lo interceptaron y lo obligaron a subir a un auto con placas del estado de Guerrero.
En seguida, los malhechores pusieron en marcha el vehículo y se fueron del sitio pero en el trayecto, la persona privada de su libertad pidió ayuda a gritos y logró soltarse de uno de los sujetos.
De inmediato se aventó por la ventana logrando sacar medio cuerpo de la cabeza a la cintura, para más tarde arrojarse del automóvil en movimiento a la altura de la Quinta “Loriffe”.
Una vez libre, el comerciante pidió ayuda de policías estatales quienes solo lo acompañaron a la subprocuraduría de la región oriente del estado, para iniciar la denuncia correspondiente.
Algunas versiones han establecido que la víctima mordió la mano de uno de sus captores lacerándole los dedos para después poder escapar.