El imputado, de nombre Santiago Atzín Ramos, de 35 años de edad, vecino de la cabecera municipal de Tlaltizapán, fue detenido la tarde del martes, aproximadamente a las tres, cuando salía de su domicilio.
De acuerdo con datos facilitados por la corporación policial, Atzín Ramos es identificado como autor intelectual del hurto al rancho que era vigilado por su sobrino José Alfredo Lobato Atzín, de 19 años de edad, habitante de la calle San Juanes, sin número, del poblado de Xoxocotla, municipio de Puente de Ixtla, que fue capturado también durante la tarde del martes.
Santiago Atzín Ramos, tío de José Alfredo Lobato Atzín, planeó el robo al rancho, propiedad de Felipe García Pulido, a donde ingresó en compañía de cuatro personas y en complicidad de su sobrino se apoderó de dos caballos, seis armas largas, seis borregos, 25 conejos, una máquina para soldar, una planta de luz, una molinera, una compresora de aire, cinco televisores, dos estéreos y un equipo de sonido, todo valorado en más de 200 mil pesos.
Una vez efectuado el hurto, José Alfredo Lobato Atzín fue amarrado por los participantes, esto con la finalidad de que el dueño de la quinta creyera que efectivamente había sido un asalto, sin embargo, las autoridades ministeriales se percataron de las diversas contradicciones del velador, por lo que éste terminó confesando haber participado en el hecho.
Ante esta situación, Santiago Atzín Ramos y José Alfredo Lobato Atzín fueron puestos a disposición del agente del Ministerio Público, acusados de los delitos de robo a casa habitación, abigeato, daños, y portación de arma de fuego.
Cabe mencionar que Santiago señaló que las personas que participaron en el robo fueron Francisco “N”, al que le apodan “El Poconda”; Javier “N”, al que le dicen “El Gallero”, y “El Gordo”, que se encuentran prófugos de la justicia.