Cuernavaca, Morelos.- “Díganme que no está muerto, que está vivo… Es mi marido”, gritó una mujer al ver a su esposo, tendido sobre una acera, boca abajo y junto a su motocicleta, en la colonia Milpillas de la capital morelense. El hombre perdió la vida al derrapar y golpearse la cabeza.
Minutos antes de las siete de la mañana del jueves, el cuerpo de esta persona fue encontrado en la calle Alhelí de la mencionada colonia.
El hombre era de complexión delgada, tez morena y estatura mediana; vestía pantalón de mezclilla azul, sudadera gris y zapatos negros. A un metro de distancia estaba una motocicleta de color azul.
Los paramédicos llegaron a las 06:50 horas; al intentar brindarle los primeros auxilios, se percataron de que el hombre ya había perdido la vida.
Sin embargo, el cadáver no tenía huellas de violencia. Por tal motivo, en un primer momento refirieron que habría muerto como consecuencia de un posible infarto, pero más tarde se confirmó que la causa del deceso fue por un golpe en la cabeza.
Al confirmarse el deceso, la zona fue acordonada por elementos de la Policía del Mando Único, ante la mirada de los transeúntes que a esa hora caminaban por dicha calle.
Minutos más tarde, una mujer llegó corriendo y trató de traspasar el límite de la cinta de acordonamiento, pero los uniformados le impidieron el paso.
Esta persona expresó que el hombre que estaba en la banqueta era su marido. En seguida, al enterarse del fallecimiento, comenzó a llorar, desconsolada, y cayó en crisis nerviosa, por lo que fue auxiliada por los allí presentes.
Momentos después, la esposa dio a conocer datos del hombre a la Policía: se llamaba José “N”, tenía 29 años de edad y era vecino de la colonia Milpillas de Cuernavaca.
Sin embargo, la mujer no se podía sostener en pie por sí sola ante la impresión de ver a su esposo sin vida. Por tal motivo, algunos familiares la sentaron sobre la banqueta y trataron de consolarla. Hubo un momento en el que estuvo a punto de desmayarse, tras lo que comenzaron a echarle aire con un periódico.
A lo lejos, la luz de una torreta anunció la llegada de la unidad del Servicio Médico Forense (Semefo), que arribó junto con un vehículo de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Uno de los peritos bajó de la camioneta con una cámara fotográfica, la que utilizó para capturar imágenes de las personas que se encontraban en el sitio.
Ello provocó que algunos vecinos se retiraran y otros rieran. Después se acercó al cuerpo y tomó más de diez fotografías desde distintos ángulos.
Por su parte, los agentes de Investigación Criminal buscaban evidencias que les permitieran esclarecer el caso.
Posteriormente, el personal de la Fiscalía dio a la indicación para que bajaran la camilla y levantaran el cadáver, el cual fue trasladado a la morgue.
De acuerdo con la necropsia, José “N” falleció debido a un golpe que se dio en la cabeza luego de que habría derrapado en la motocicleta como consecuencia de la gravilla que estaba esparcida en el piso, además de que el hombre no llevaba casco.