Las acciones para detener la tala en la ciudad han resultado en el cierre de 28 aserraderos y 32 madererías ilegales.
Durante la última semana, se llevaron a cabo nueve clausuras de aserraderos, confiscando 2,012 tablas, 2,625 piezas de madera en escuadría y 1,365 troncos, según informó el jefe de Gobierno, Martí Batres.
Destacó que en las últimas dos semanas se llevó a cabo un operativo histórico contra los talamontes, logrando resultados significativos. Nunca antes en la administración se había asegurado una cantidad tan grande de madera.
A pesar de las reacciones negativas de los talamontes para evitar los operativos, las instituciones de seguridad se mantuvieron firmes en su objetivo y lograron rescatar una importante cantidad de madera.
El secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, enfatizó que durante el año se han realizado más de 300 inspecciones a madererías, lo que ha llevado a la detención de 17 personas y la incautación de 15 vehículos.
Además, se han clausurado ocho centros de almacenamiento y transformación de materia prima forestal, en su mayoría ubicados en Santo Tomás Ajusco, San Miguel Topilejo y San Miguel Ajusco.
Para contener la situación, se mantendrán los trabajos de vigilancia en diferentes zonas para evitar que los grupos dedicados a la tala o al comercio ilegal se desplacen a otras localidades.
