Las máquinas tragamonedas han quedado ‘canceladas’, ya que el Diario Oficial de la Federación (DOF) publicó un decreto en el que se reformó el Reglamento de la Ley Federal de Juegos y Sorteos.
Según el DOF, los juegos de apuestas con naipes, dados, ruletas y máquinas tragamonedas ya no pueden ser interpretados como sorteos legales. La Ley Federal de Juegos y Sorteos define las máquinas tragamonedas como dispositivos en los cuales las personas realizan apuestas al insertar dinero en efectivo u otra forma de pago para obtener un premio.
El propósito detrás de estas modificaciones es ejercer un mayor control en la vigilancia e inspección de los juegos relacionados con apuestas y sorteos. Según el DOF, los únicos sorteos reconocidos como legales en el país son los organizados por la Lotería Nacional para la Asistencia Pública.
Imagen tomada de Tráfico ZMG
¿Qué sucederá con los negocios de máquinas tragamonedas que hay?
De acuerdo con el DOF, estos negocios podrán continuar operando durante el período de vigencia de sus respectivos permisos, pero no por un período mayor o igual a 15 años.
Estas máquinas, que fueron legalizadas con fines recreativos durante el sexenio de Felipe Calderón, han sido objeto de controversia debido a su potencial para fomentar la corrupción de menores y dar paso a la delincuencia organizada, según la Secretaría de Gobernación. Se argumenta que su uso no constituye un simple juego, sino una adicción peligrosa.
Cabe mencionar que en 2020, estas máquinas tragamonedas ya habían sido objeto de regulación, al prohibirse su acceso a menores de 14 años. Con esta nueva reforma, se busca controlar aún más su presencia en el mercado y mitigar los riesgos asociados a su operación.