Las presas del Sistema Cutzamala, clave en el suministro de agua al Valle de México, han registrado un incremento en sus niveles gracias a las lluvias de las últimas semanas.
Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), los embalses pasaron de un 26.9% de su capacidad a un 29.1% desde el inicio de la temporada de lluvias el 20 de junio.
Citlalli Elizabeth Peraza Camacho, directora general del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM), destacó el impacto positivo del manejo hídrico y las precipitaciones en las presas El Bosque, Valle de Bravo y Villa Victoria, que aportan el 25% del agua consumida en la región.
El Bosque aumentó su capacidad de 30.9% a 36.2%, Valle de Bravo de 27% a 28.5%, y Villa Victoria de 22.4% a 22.9%.
Durante la semana del 8 al 14 de julio, se activó tres veces un protocolo conjunto con los gobiernos de la Ciudad de México y del Estado de México para manejar eficazmente el drenaje pluvial y mitigar los efectos de las lluvias en la población.
En este sentido, la titular del OCAM destacó que para mantener el adecuado funcionamiento de esa infraestructura es necesario conservarla libre de basura.
Para ello, en lo que va de 2024, de diversos canales, ríos, túneles y drenes, entre otras estructuras, se han extraído casi 33 mil 800 metros cúbicos (m³) de residuos sólidos, correspondientes a un total de más de 20 mil 276 toneladas de desechos y más de 332 mil 800 m³ de azolve.
Los desechos retirados incluyen predominantemente plásticos, electrodomésticos y basura doméstica, que afectan seriamente la operatividad de las plantas de bombeo como El Caracol y La Caldera.
La Conagua hizo un llamado a la población para disponer correctamente de la basura y evitar riesgos de inundaciones.