Ismael Zambada García, alias “El Mayo” Zambada, era uno de los narcotraficantes más buscados por Estados Unidos.
Nacido el 1 de enero de 1948 en Culiacán, Sinaloa, “El Mayo” se destacó inicialmente en los años 90 como coordinador clave de operaciones de narcotráfico y miembro del Cártel de Juárez.
A finales de los 90, Zambada se consolidó como uno de los capos más influyentes de México, facilitando el transporte de toneladas de cocaína, marihuana y heroína.
Posteriormente, formó el Cártel de Sinaloa junto a figuras notorias como Joaquín “El Chapo” Guzmán y Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”.
En los últimos años, su círculo cercano ha disminuido significativamente tras la detención y extradición a Estados Unidos de varios familiares, incluidos sus hijos Ismael Zambada Imperial, “El Mayito Gordo”, y Vicente Zambada Niebla, “El Vincentillo”, quienes testificaron en el juicio contra “El Chapo” en 2019.
El 22 de septiembre de 2021, el Departamento de Estado de los Estados Unidos anunció que triplicó la recompensa que ofrecía por información que resultara en el arresto y/o la condena del líder del Cártel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada García.
A través de un comunicado la agencia federal estadounidense dio a conocer que elevó de 5 millones de dólares, que ofrecía originalmente, hasta 15 millones bajo su Programa de Recompensas por Narcóticos.
El 15 de febrero pasado, un fiscal de Nueva York acusó a Ismael “El Mayo” Zambada, fundador y líder del Cártel de Sinaloa, por los delitos de fabricación y distribución de fentanilo en Estados Unidos.
El fiscal Breon S. Peace del Distrito Este de Nueva York emitió este jueves ante un tribunal federal de Brooklyn esta quinta imputación, que se añade a las anteriores pronunciadas por delitos como dirigir una organización criminal, asesinato, lavado de dinero y diversos delitos relacionados con el narcotráfico.
Según el fiscal, Zambada “sigue liderando el Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones más violentas y poderosas del narcotráfico en el mundo”, y recuerda que los delitos atribuidos se extienden durante 10 años, de 2014 a 2024.