En la Cámara de Diputados, se aprobó por unanimidad la reforma a la Ley Ferroviaria, que otorga al Estado mexicano el derecho de utilizar las vías ferroviarias para prestar el servicio de transporte de pasajeros.
La modificación al artículo 28 de la Constitución subraya que este tipo de transporte es clave para el desarrollo del país y estará bajo el control del Estado.
El dictamen también permite a las empresas con concesiones de transporte de carga obtener permisos para operar el servicio de pasajeros, pero en todos los casos se dará prioridad a este último.
La iniciativa fue aprobada con 472 votos a favor y ninguno en contra, pese a que se presentaron 135 reservas, ninguna fue aceptada. El siguiente paso será su revisión en comisiones del Senado, para luego ser discutida en el Pleno.
Durante el debate, todos los grupos parlamentarios apoyaron la medida por los beneficios que traerá en conectividad y desarrollo para el país.
La diputada morenista Luz María Rodríguez destacó que esta reforma representa un avance importante en el progreso nacional, afirmando que los trenes no solo transportarán personas, sino que serán un símbolo de unidad y equidad.
Por su parte, el diputado priista Arturo Yáñez Cuellar señaló que, aunque la reforma es positiva, se enfrenta a retos importantes como la seguridad y la transparencia en el uso de los recursos. También hizo un llamado a garantizar que el proyecto beneficie a todos, sin caer en prácticas de favoritismo.
El diputado de Movimiento Ciudadano, Hugo Manuel Luna Vázquez, reiteró el apoyo de su bancada a la iniciativa, destacando la importancia de hacer que el sistema ferroviario funcione de manera eficiente y sostenible para el futuro del país.