El Instituto Nacional Electoral (INE) se encuentra en un estado de "pausa" a la espera de los resultados de diversas impugnaciones relacionadas con la reciente reforma judicial.
Durante un análisis preliminar de las leyes secundarias y la convocatoria, los consejeros han detectado inconsistencias que complican la organización de la elección de jueces, especialmente en el manejo de las más de 800 postulaciones que se deben reflejar en las boletas.
Norma de la Cruz, integrante de la comisión especial encargada de la elección de ministros, magistrados y jueces, explicó que existen discrepancias entre el decreto, la ley secundaria y la convocatoria, lo que ha llevado al INE a un proceso exhaustivo de análisis.
"Hasta que nos digan formalmente si podemos continuar con los trabajos o no lo estaremos haciendo", aseguró.
De la Cruz también mencionó que se están llevando a cabo varios procedimientos legales, incluidos amparos y juicios electorales, y que están a la espera de que la Sala Superior del Tribunal Electoral se pronuncie sobre estos temas y establezca el ámbito de competencias correspondiente.
Los consejeros Jorge Montaño y Carla Humphrey coincidieron en la importancia de aguardar la resolución de las suspensiones provisionales y la sentencia de la Sala Superior, subrayando que los asuntos electorales no deben estar sujetos a los amparos, que son competencia de otros jueces.
Se anticipa que, al finalizar el evento conmemorativo del voto femenino en México, la consejera presidenta del INE, Guadalupe Taddei, ofrecerá una conferencia de prensa para proporcionar más información.
De la Cruz también destacó la posibilidad de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación pueda invalidar los cambios realizados.
“Si bien es cierto, la Sala Superior (del tribunal electoral) nos puede decir mañana una cosa, igual la Suprema Corte te dice en los siguientes días que todo el proceso no es válido y ninguno de los actos anteriores son válidos. Por eso tenemos que esperar”, enfatizó.
Además, la consejera lamentó que al INE se le asigne la responsabilidad de definir la geografía electoral para la elección de jueces.
También se deben aclarar aspectos específicos como el voto de los mexicanos en el exterior, que para las elecciones ordinarias es válido a través de medios electrónicos, postales y presenciales, pero que en esta reforma se limitaría a votos testimoniales.