Por octava vez en la última década, Colima se posicionó como el estado con la mayor incidencia de asesinatos en México durante 2024, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
El estado registró un total de 845 homicidios, seis de ellos clasificados como feminicidios, lo que resultó en una tasa de 110.05 víctimas por cada 100,000 habitantes, casi cinco veces superior al promedio nacional de 22.72 en el mismo periodo.
A pesar de los esfuerzos, 2023 fue el año más violento en la última década para Colima, con 913 homicidios y una tasa histórica de 117.64 casos por cada 100,000 habitantes, superando a 2022, que cerró con una tasa de 115.39.
En los últimos 10 años, el estado ha acumulado un total de 6,899 asesinatos, de los cuales 2,718 ocurrieron durante los tres años y dos meses de la actual administración estatal.
El aumento de homicidios en Colima comenzó en el gobierno de José Ignacio Peralta Sánchez, quien vio una dramática escalada en las tasas de homicidio.
De 25.41 víctimas por cada 100,000 habitantes en 2015, la cifra se disparó a 80.02 en 2016 y alcanzó su pico más alto en 2017 con 111.
A pesar de un ligero descenso en los años posteriores, Colima ha mantenido la primera posición en tasas de homicidio, salvo en 2021, cuando fue superado por Baja California.
En 2024, Morelos ocupó el segundo lugar en homicidios con una tasa de 74.42, seguida de Baja California con 58.16, y otros estados como Chihuahua, Guanajuato, Guerrero y Sonora, que también registraron altas cifras de homicidios por cada 100,000 habitantes.