Claudia Sheinbaum, presidenta de la República, rechazó este martes destituir al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, a pesar de las demandas de la ciudadanía tras la violencia desatada en el estado por la lucha entre cárteles del narcotráfico.
“Hay ‘comentócratas’ que están diciendo que actuemos como los gobiernos príistas de antes, que nosotros quitamos y ponemos gobernadores. No, eso lo hace el pueblo. No lo hace la presidenta de la República”, señaló durante su conferencia de prensa.
La respuesta de la mandataria se dio ante las exigencias de los manifestantes en Sinaloa, quienes el jueves y domingo pasados realizaron marchas en Culiacán, capital del estado.
Los protestantes exigían la destitución de Rocha tras el asesinato el 19 de enero de Gael y Alexander Sarmiento, de 9 y 12 años, junto con su padre, Antonio, mientras viajaban en un vehículo en medio de la pugna entre cárteles. Los manifestantes también acusaron al gobernador de tener vínculos con el narcotráfico.
Al respecto, Sheinbaum afirmó que la responsabilidad de su administración es coordinarse con los gobiernos municipales y estatales, pero que no le corresponde destituir a los gobernadores.
"No nos corresponde al gobierno, le corresponde, en todo caso, a las fiscalías o a la Fiscalía General de la República. Entonces, a todos aquellos que piden que la presidenta quite y ponga gobernadores, pues no. Eso se llama autoritarismo. Nosotros creemos en la democracia".
"El pueblo quita gobernadores, no la Presidenta", dice @Claudiashein sobre Rubén Rocha. pic.twitter.com/VNioY2rCgk
— Manuel Lopez San Martin (@MLopezSanMartin) January 28, 2025
En cuanto a la situación de seguridad en Sinaloa, Sheinbaum destacó que su gobierno está trabajando para garantizar la paz en el estado.
“Que sepa el pueblo de Sinaloa que estamos trabajando todos los días para garantizar la paz y la seguridad. Esta responsabilidad de la contención de los homicidios o de la violencia que se ha estado viviendo a partir de septiembre tras la detención de estos capos, es responsabilidad del gobierno estatal”, afirmó.
Desde el inicio de la pugna interna en el Cártel de Sinaloa en septiembre pasado, más de 600 personas han sido asesinadas, según Sheinbaum. La violencia se intensificó tras la captura de Ismael "El Mayo" Zambada y Joaquín Guzmán López en los Estados Unidos.
Los manifestantes, incluidos niños, siguen pidiendo la renuncia de Rocha, a quien vinculan con el narcotráfico debido a una declaración de Zambada, quien aseguró que se reuniría con él el día de su captura.