La presidenta Claudia Sheinbaum expresó su reconocimiento al escritor peruano Mario Vargas Llosa tras su fallecimiento a los 89 años, y envió condolencias a sus familiares.
“Falleció un gran escritor: Vargas Llosa”, dijo al iniciar la conferencia presidencial en Palacio Nacional.
A pesar de las diferencias políticas entre el escritor y el actual movimiento en el poder, Sheinbaum resaltó la importancia de su obra literaria.
“Más allá de las diferencias políticas siempre hay que reconocer la grandeza de un escritor entonces vaya nuestro reconocimiento, nuestras palabras y el pésame a sus familiares”, expresó.
Lamenta @Claudiashein muerte de Mario Vargas Llosa.
— Manuel Lopez San Martin (@MLopezSanMartin) April 14, 2025
"Más allá de las diferencias políticas, siempre hay que reconocer la grandeza de un escritor"pic.twitter.com/K1vtCq3LE5
Vargas Llosa fue un crítico constante de los gobiernos de izquierda en América Latina. En 1990, se refirió a México como "la dictadura perfecta", al criticar al PRI, partido que se mantuvo en el poder durante varias décadas.
Años después, manifestó su desacuerdo con la llegada de Andrés Manuel López Obrador al poder, al considerarlo un líder populista y demagogo.
Con motivo del ascenso de López Obrador a la presidencia, el premio Nobel de Literatura señaló su inquietud por el rumbo del país:
“La verdad no me gusta la figura de un presidente que se exhibe todas las mañanas (refiriendo las conferencias matutinas de López Obrador) comentando los artículos que lee en la prensa y muchas veces censurando, atacando a los periodistas, no me parece que esa sea la función de un presidente y creo que él trasgrede un poco esa función, porque piensa, tal vez, que le da más popularidad, pero no sé si le da más popularidad, o más bien la reduce”.
Ante esas críticas, el expresidente López Obrador respondió señalando que el autor estaba en decadencia y comentó que “en otros tiempos había imaginación, talento, era propositivo, esperanzador”, añadiendo que tras leer sus declaraciones “durmió muy bien”, aunque en días posteriores continuó respondiéndole desde sus conferencias matutinas, espacio que ha mantenido la actual administración.
A pesar de los desencuentros ideológicos, la presidenta Sheinbaum reconoció la relevancia del legado literario de Vargas Llosa y su impacto en la cultura y el pensamiento contemporáneo.