Julio César López Patolzin, uno de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, se enlistó en el Ejército mexicano en “octubre o noviembre de 2013” pero desertó, luego de caerse de un puente durante las tareas del Plan DN-III, el cual se activó tras el paso de los huracanes Ingrid y Manuel por Guerrero.
Así lo dio a conocer su padre Rafael López Catarino, quien explicó en entrevista con W Radio que el joven se inscribió al Ejército en Chilpancingo, Guerrero, luego de perder un año de escuela.
“Ahí estuvo un tiempo, nomás que con el paso del huracán Ingrid, él tuvo un accidente, se cayó de un puente haciendo labores. Nos comentaron que se resbaló y cayó por el puente, desmayado y se lastimó su cadera.
“Me dijo ‘ya no voy a poder andar con mi mochilota’ y yo le digo ‘lo que me interesa eres tú, así que si quieres aguántate y salte y esperas para la Normal, donde siempre has querido’. Así él desertó, él ya no fue”, dijo López Catarino.
El padre del normalista señaló que, luego de entrar a la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, su hijo ya no regresó al Ejército, donde era un soldado razo.
“El gobierno ya no sabe a quién echarle la culpa, ¿por qué no investigan a Ángel Aguirre, que fue gobernador de aquí, de Guerrero? Él debe saber muchas cosas, aparte de que tienen al presidente de Iguala, José Luis Abarca, a quien lo protegiendo, porque no hay ninguna sentencia”, agregó.
Estas declaraciones ocurren a sólo unos días de que el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, confirmó que Julio César López Patolzin era un militar en activo. | Animal Político