Sin embargo, todavía hasta ayer los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) no se ponían de acuerdo para elegir a su candidato para este cargo que es uno de los más importantes del Poder Legislativo local.
El G-5, integrado por diputados del PRD, PT, Convergencia, Verde Ecologista y Nueva Alianza, sigue con sus mismas exigencias, pues insiste que votará por un legislador priísta para este cargo, pero primero los 15 integrantes de la bancada priísta tienen que lograr la unanimidad, y después su candidato tiene que pasar por el filtro de los otros partidos.
Desde temprano, un bloque de diputados priístas se presentó en el salón de plenos del Congreso del Estado como una manera de presión para iniciar la sesión, pero al ver que el presidente de la Mesa Directiva, Othón Sánchez Vela, no llegaba al recinto legislativo, el priísta Fernando Martínez Cué se presentó en su oficina para pedir a sus colaboradores que le hablaran por teléfono para pedirle que llegara a presidir la sesión.
La esperanza de algunos priístas era que una vez iniciada la sesión, se lograrían los acuerdos necesarios para designar a un priísta en el cargo antes mencionado.
Mientras que algunos priístas insistían en iniciar la sesión, el diputado Rufo Villegas Higareda anunció su salida de la bancada parlamentaria del PAN, porque su partido inició un proceso de expulsión en su contra, al mismo tiempo que reconocía que ha tenido acercamientos con algunos actores priístas que lo han invitado a sumarse a ese partido.
Mientras tanto, en el salón de plenos seguían los cabildeos, pues a la lista se sumó ayer la diputada Lilia Ibarra Campos, quien pretende llegar a la presidencia, pero al mismo tiempo se seguía con las propuestas de David Salazar Guerrero, Fernando Martínez Cué y Andrés González García, todos ellos del Revolucionario Institucional.
Pasadas las 12 horas, justo cuando los diputados del PAN ofrecían una rueda de prensa para hablar sobre la salida de Rufo Villegas, el presidente de la Mesa Directiva ordenó pasar lista, pero no se logró el quórum que pide la ley, ya que se ausentaron diputados del G-5, PAN, y un grupo de seis priístas.
Solamente 15 legisladores asistieron, y falto sólo uno para el quórum, pues el resto decidió hacer el vacío para que la sesión no se llevara a cabo.