Cuernavaca, Morelos.- Durante el presente año aumentaron los derrames de combustibles por tomas clandestinas en ductos en Petróleos Mexicanos (Pemex). La mañana de ayer martes se reportó una fuga de gasolina en predios ubicados al norte de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) en Chamilpa, el cual al mediodía ya había sido controlado.
El titular del Instituto de Protección Civil del estado, Francisco Javier Bermúdez Alarcón, informó que constantemente hay reuniones con autoridades de Pemex, de la Secretaría de la Defensa Nacional, Mando Morelos (único) y de protección civil de los municipios de Huitzilac y Cuernavaca, para realizar acciones con el fin de salvaguardar la integridad de las personas, pues las referidas tomas clandestinas implican un grave riesgo de incendios e incluso explosiones, si hay grandes cantidades de combustibles.
Apuntó que la fuga registrada este martes en el lado norte del campus Chamilpa de la UAEM llegó a alcanzar hasta cinco metros de altura, por lo que elementos de PC del estado, así como de la UAEM, acudieron al lugar y Pemex cerró algunas válvulas, por lo que se logró controlar la situación. El lugar quedó resguardado por militares. No hubo personas afectadas y tampoco fue necesario el desalojo del campus universitario.
“Sí se ha generado un incremento importante, no sólo en Morelos, sino en todo el país; no estamos exentos, sobre todo en la zona norte de Cuernavaca y Huitzilac”, expresó el funcionario, al señalar que no hay cifras específicas, pero sí ha aumentado el número de casos en todo el territorio nacional, con el alza en el precio de las gasolinas.
A decir de Bermúdez Alarcón, PC sólo actúa en lo que se refiere a la prevención de riesgos; las denuncias y la actuación penal no es de su competencia.
Advirtió que en esta temporada de incendios forestales el peligro es mayor, porque si se combina el fuego con algún derrame ocasionado por una toma clandestina “es como una bomba”.
“Desafortunadamente quienes incurren en este delito -que ya está muy penado con la reciente reforma a la ley-, ponen en riesgo no sólo su vida, sino la de quienes habitan o pasan por los lugares donde almacenan”, y de donde se extrae ilícitamente el hidrocarburo, añadió.
Además consideró que los ayuntamientos deben colaborar en la vigilancia con sus áreas de protección civil, para identificar las tomas. Los ayuntamientos son responsables de evitar que se construya sobre los ductos.
En el caso de Cuernavaca, comentó que ya hay construcciones, por lo que se requiere un plan de protección para alertar a la población que hay ductos y que no se debe escarbar en determinados puntos.
En cuanto al daño ecológico, apuntó que la Secretaría de Desarrollo Sustentable habrá de hacer el estudio del derrame y la posible afectación.