Durante el curso “Defensa de los Derechos Humanos Dentro de los Centros Preventivos y de Readaptación Social”, los servidores públicos recibieron información sobre cómo preservar la seguridad y llevar a cabo el proceso de reinserción social sin violentar las garantías de las personas procesadas o sentenciadas por la comisión de un delito.
Algunos de los lineamientos para el respeto de los derechos de las personas en prisión subrayados por la CNDH son dignidad a los internos, alimentación, servicios médicos, clasificación adecuada de la población con separación entre internos procesados y sentenciados.
Además, mantener en buen estado las instalaciones (higiene, ventilación, servicios sanitarios y mobiliario) y funcionamiento de las diversas.
“La defensa de los derechos humanos en la prisión no implica interferir en la decisión de fondo en un proceso judicial, sino en garantizar que las consecuencias de esos procesos se ajusten a los niveles de humanidad y de certeza jurídica reconocidos por la ley e instrumentos internacionales”, subrayaron los capacitadores de la CNDH.