Tan sólo en el 2010, los Servicios de Salud de Morelos (SSM) en sus unidades ubicadas en todo el estado realizaron 142 mil detecciones, como una medida para su tratamiento temprano y que permita implementar las acciones correspondientes para su control y prevención de complicaciones.
A unos días de haberse conmemorado el Día Mundial de la Hipertensión Arterial, los SSM dieron a conocer que este padecimiento se ha convertido en una enfermedad recurrente y en México más de 15 millones de mexicanos entre los 20 y 69 años se conocían como hipertensos, siendo los hombres mayores de 60 años el grupo etario en el que llega a presentarse hasta en un 50 por ciento.
La Secretaría de Salud a través de los SSM ha reforzado no sólo las acciones de detección oportuna a través de las “Rutas de la Salud”, estrategia que ha permitido realizar 9 mil 900 detecciones, sino también ha fortalecido la parte preventiva con la conformación de 95 “Grupos de Ayuda Mutua” (GAM) integrados en su mayoría por personas de la tercera edad o con padecimientos crónico-degenerativos.
En Morelos, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición del 2006, se reportó que el 30 por ciento de la población mayor de 20 años de edad padece hipertensión.
Con base a este reporte, es importante que la población conozca los factores de riesgo para desarrollar hipertensión arterial sistémica; al tener más de 20 años los hombres son más propensos a desarrollarla por presentar sobrepeso u obesidad.
Si a esto se suma el sedentarismo, es decir, la nula o baja actividad física, llevar una alimentación rica en sal y grasas, consumo de tabaco y alcohol, estrés, diabetes, presentar niveles altos de colesterol y triglicéridos, y contar con antecedentes familiares, crece la posibilidad de presentar un cuadro de hipertensión arterial.
Las recomendaciones para prevenirla son realizar actividad física de leve a moderada mínimo 30 minutos diarios; mantener un peso corporal adecuado a la talla y edad; evitar el consumo de alimentos con alto contenido de sal, como los embutidos; moderar el consumo de grasas, de preferencia evitar grasas de origen animal; consumir diariamente verduras y frutas en la dieta diaria, y evitar el consumo de alcohol y tabaco.
En los GAM son detectados y tratados los padecimientos crónico-degenerativos como diabetes, hipertensión o dislipidemias, grupos en que se realizan sesiones de activación física, para lo que se cuenta con más de 200 bicicletas fijas, orientación nutricional y se brinda información sobre la prevención y el control de enfermedades en Centros de Salud particularmente.
Esto permitirá en el largo plazo reducir la prevalencia de casos de hipertensión arterial, mientras que en el corto plazo permite elevar la calidad de vida de los pacientes.