Óscar Escobedo Licona, encargado de la Jefatura del Departamento de Análisis Estadístico de la dirección del ramo, a través de una videoconferencia (desde la Ciudad de México) fue el encargado de suministrar los conocimientos necesarios, que guiaron a funcionarios en el uso del instrumento.
La urna electrónica una vez que recibe los datos de la voluntad ciudadana expulsa un documento, que constata dicha información, que es depositada en un receptáculo diáfano. Los componentes de una urna electrónica son un módulo de activación, cable de energía, puerta deslizable, interruptores y demás.
En este sentido, los trabajadores comenzaron a medir fortalezas y debilidades sobre esta nueva modalidad; sobre todo en lo que respecta al tiempo que podría demorar un ciudadano en la emisión de su sufragio. Lo anterior, apuntó el vocal de organización electora, José Marcelo Lira Chávez, se lleva a cabo en concordancia con principios rectores del Instituto y que son certeza, legalidad, independencia, imparcialidad y objetividad.
La urna electrónica también será sometida a una prueba general, los días 25 y 26 de julio del año próximo en los módulos de atención ciudadana del estado, donde se responderá a una encuesta sobre la calidad, trato, tiempo y expedición de la credencial para votar con fotografía.