En 1996 se ciudadanizaron los procesos electorales, se designaron autoridades sin vínculo partidista para organizar y sancionar las justas constitucionales, en las cuales los partidos y sus candidatos buscan el mayor número de sufragios y con esos votos conducir una administración pública o representar a un grupo de ciudadanos en el Poder Legislativo.
La reforma realizada en 1996, se consideró como el primer gran paso para arribar a la vida democrática. Morelos fue la primera entidad en la que se realizó, en marzo de 1997, una elección que fue organizada y sancionada por un Instituto Estatal Electoral (IEE), integrado por consejeros ciudadanos.
Ahí se quedaron los grandes avances y los resultados que arrojan cada contienda, provocan la inseguridad de quien logró más votos y el deseo de venganza de quienes no fueron favorecidos por el sufragio ciudadano y con ese sentimiento se organizan las revisiones y modificaciones a leyes electorales que siguen sin contar con una ley de partidos y con sanciones firmes que repriman la intención de partidos y candidatos de realizar actos al margen de la ley para obtener el mayor número de sufragios.
A menos de un año de que se celebre la siguiente elección debe revisarse el proceso que seguirá cada organización y los aspirantes de las mismas, para determinar quienes serán los candidatos, a que puestos de elección popular y porque llegaron a esa conclusión, ya sea mediante asamblea, consulta a la base, consenso, encuesta, decisión del comité nacional o acuerdo, o la combinación de varias de estas decisiones, cualquiera que sea la vía, la violencia y la confrontación caracterizan esta etapa y generan el encono que se vive en campañas y elecciones.
El PRI, el PAN y el PRD han observado diversos métodos para la elección de sus candidatos a gobernador en los procesos electorales que se han celebrado con autoridades ciudadanas, en donde la vigilancia social ha certificado que el candidato que logre el mayor número de sufragios sea el que arribe a la responsabilidad pública.
Ningún partido ha definido por primera vez en tiempos modernos cuál será el método para la designación de candidato a gobernador y por ello vale la pena revisar la forma como se advierte tomarán esa decisión que será fundamental, en un proceso en el cual la marca, o sea el partido político, puede tener menor peso que el candidato, sobre todo cuando se advierte que al interior de todos los partidos existe desgaste entre la dirigencia y la militancia por determinar quienes serán los candidatos.
Por decisión de los partidos políticos, éstos seguirán siendo agencias de colocación laboral participando en las contiendas en un escenario de libertinaje político, donde no tienen ningún compromiso social ni respetan ley alguna de transparencia en el manejo de las decisiones que toman como organismos de interés público, al no tenerse aprobada una ley de partidos, cada organización determina la forma como son nombrados, electos o designados sus candidatos y las fórmulas que les acompañan. Algunos de estos métodos confirman el reclamo social de que deben aprobarse las candidaturas ciudadanas ante la negativa de los partidos de abrir espacios para la participación pública de ciudadanos ajenos a la militancia en esas organizaciones.
En Morelos estarán en juego 551 posiciones electorales locales y más de una docena federales para aspirantes propietarios y suplentes, el 1 de julio aparecerán en las boletas los nombres de candidatos a ocupar 33 presidencias municipales y sus suplentes; las 33 sindicaturas y sus suplentes; las 179 regidurías y sus suplentes; los 18 diputados locales y sus suplentes; y de ahí se integran los 12 diputados plurinominales y sus suplentes; así como la boleta de gobernador, en la urna federal aparecen los 5 diputados federales y sus suplentes; las fórmulas a senadores y sus suplentes; serán electos 3, 2 de mayoría y 1 de primera minoría, así como la cuota de diputados federales plurinominales que le correspondan dentro de la circunscripción a la entidad, y la votación nacional para presidente de la república.
En esta lista donde se acomodan a la mayoría de quienes desde el interior de un partido señalaron: “Que querían ser…” y no fueron enviados a la posición preestablecida por sus organizaciones, son candidatos “circunstanciales”. Esas posiciones son distribuidas para “mantener la unidad y la disciplina de los partidos”, y forman parte de la revisión que permite conocer los efectos que en el número de votos tiene el método que se utilice para la selección de algún candidato, en cada partido la determinación es diferente.
La educación y la evolución del hombre en sociedad y de la sociedad misma están enfocadas a la competencia que ocasionalmente se convierte, como en el caso de la política mexicana, en contienda (contienda: pelea, disputa, alteración con armas o con razones; competencia: disputa entre dos o más sujetos sobre una cosa, acción antagónica para la posesión de determinadas posibilidades).
Morelos es una expresión sintetizada de una actitud nacional. “En Política se contiende no se compite”, por ello el primer triunfo o la primer derrota es el ser integrado en una lista de posibles aspirantes como lo confirman en esta etapa los nombres de Graco Ramírez, Juan Salgado Brito, Rabindranath Salazar y Fidel Demédicis en el PRD; Adrián Rivera, Alejandro Villareal, Víctor Caballero y Demetrio Román en el PAN; y Manuel Martínez Garrigós, Francisco Moreno Merino, Maricela Sánchez, Amado Orihuela, Jorge Meade, Jorge Morales, Guillermo del Valle y Rosalina Mazarí, en el PRI. Entre ellos se realiza la primer contienda, en la que habrá derrotados y vencedores. Posteriormente se realizará la contienda constitucional.
EL PRD Y SUS CANDIDATOS
El Partido de la Revolución Democrática no utiliza “métodos democráticos para la designación de sus candidatos”, en 1997, el comité ejecutivo nacional intervino para que la candidatura a la presidencia municipal de Cuernavaca fuera para el ex priista Jorge Pérez Bello, quien se desempeñó como secretario de Finanzas del PRI durante la administración de Antonio Rivapalacio, esta candidatura fue impulsada por el grupo de perredistas que arribaron a Morelos junto con Graco Ramírez, y que mantenían diferencias por el control del partido con el grupo de fundadores que participaron en el Frente Democrático Nacional en 1988.
Esta estructura estaba integrada por representantes de diversas organizaciones políticas en la entidad, entre los que destacan Juan Ignacio Suárez Huape, Oscar Rosas, Eloy Ortiz, los hermanos Alberto y Marley Tapia, Mario Rojas y Julián Vences, entre otros, que habían participado en diversas luchas sociales en la entidad, habían determinado que su candidata fuera Adriana Mújica, sin embargo vinieron los integrantes de Comité Nacional y Registraron al ex priista.
Este registro impuesto desde el centro del país provocó que los perredistas de diversos grupos locales, se replegaran hacia el resto de los municipios, con candidatos que habían estado vinculados al PRI lograron diversos triunfos, entre los que destaca el de Adolfo Barragán Cena, quien había trabajado con el último gobierno priista de Jiutepec en el sistema de agua potable y encontró cabida en esta organización, con ella gobernó ese importante municipio de 1997 al 2000 y fue ubicado entre los precandidatos a la gubernatura.
Otro triunfo perredista con otro simpatizante del PRD fue en Cuautla con Francisco Rodríguez Montero, ahí también logró la mayoría de votos para esa organización en la elección federal de ese año, el PRD se convirtió en la primera fuerza electoral porque logró 3 de los 4 distritos federales electorales con candidaturas singulares, entre ellas destaca la del candidato del Segundo Distrito con cabecera en Yautepec, Anastasio Solís Lezo, quien fue activista del Movimiento Ciudadano en contra de la construcción de un desarrollo turístico inmobiliario en Tepoztlán en 1995, sobre el mismo existía orden de presentación girada por la Procuraduría General de Justicia del estado, por lo que aseguran su campaña la realizó llevando permanentemente un amparo contra cualquier auto de autoridad en el interior de un morral que cargaba. Así fue diputado federal de 1997 al 2000.
Las diferencias al interior del PRD provocaron que en esa elección federal, según recuerda el presidente de ese partido en aquella ocasión, Julián Vences, en los distritos 2, 3 y 4 el PRD contendiera en una alianza con el Partido Civilista Morelense y lograron la mayoría de votos. En el Distrito 1 el candidato Raúl Iragorri fue designado desde el comité nacional y recibió 39 mi votos contra 47 mil del priista Alfonso Sandoval Camuñas, en esa elección el PRI pierde la alcaldía con Ana Laura Ortega, hija del ex gobernador priista Lauro Ortega, impulsada por el gobernador Jorge Carrillo Olea, y en julio triunfa con el ex alcalde y ex líder del congreso local que colaboró en el despacho del ex gobernador Antonio Rivapalacio.
En el 2000 los grupos al interior del PRD vuelven a enfrentarse y determinan que su candidato fuera el empresario Raúl Iragorri, que había perdido la elección federal de 1997, los enfrentamientos para todas las candidaturas se generalizaron. Un ejemplo fue el conflicto entre el grupo nacional y el local por Cuernavaca, desde México impulsaban a Ana Lilia Cepeda, del grupo Mujeres por la Democracia, y aquí se incluyó a Ricardo Dorantes San Martín, quien era diputado y que se integró desde el PRI al PRD en la legislatura 1997-2000.
En el 2003 volvieron atener conflictos para determinar quién sería el candidato a la presidencia municipal de Cuernavaca, entre el empresario Raúl Iragorri y el ex diputado federal panista Fernando Martínez Cue, el ex legislador Iragorri fue candidato por otro partido y se integró al congreso local como legislador plurinominal. En el 2006 impulsaron por segunda ocasión a un candidato que en la elección anterior había perdido, Fernando Martínez Cue, quien también contó con el impulso del comité nacional.
En el 2009, luego de haber logrado una importante votación en el 2006, que los colocó como la segunda fuerza en la entidad y les permitió ingresar a un senador, un diputado federal y un importante número de distritos locales y presidencias municipales, continuaron las diferencias entre los grupos, sus candidatos más relevantes de las contiendas anteriores no se involucraron con esa organización. El empresario Iragorri se mantuvo al frente de sus empresas y Martínez Cue fue candidato a diputado local por el PRI, terminaron enviando como candidato a presidente municipal a Alejandro Mojica y a diputado federal por el primer distrito al ex procurador Hugo Bello Ocampo, en esta ocasión fueron la tercera fuerza y no lograron conservar ningún distrito local o federal y sólo triunfaron en 3 municipios: Jiutepec, Emiliano Zapata y Tlalquitenango, y tienen en el congreso a 3 diputados de representación proporcional.
EL PAN Y SUS CANDIDATOS
Desde que se establecieron las elecciones organizadas y sancionadas por una autoridad ciudadana, el Partido Acción Nacional mantuvo una integración y capacitación de sus militantes y representantes sólida a partir de 1997, y hasta la elección de 2006 fueron 4 los procesos en los que mantuvo una participación ordenada, en la primera determinaron concentrar sus recursos y esfuerzos en la capital del estado, lo que les permitió obtener en Cuernavaca, 3 distritos y la Presidencia Municipal, lograron también mayoría en el municipio de Emiliano Zapata, y con esa estructura mantuvieron un trabajo coordinado que les permitió avanzar en la siguiente contienda.
El PAN fue un partido que en Morelos mantuvo desde su fundación y hasta la designación de candidatos de 1997 una perspectiva “testimonial”, centraban su estrategia en denunciar los abusos del PRI y convertían a sus dirigentes en candidatos a los espacios plurinominales que sabían podían considerar “amarrados” de acuerdo al porcentaje histórico de votación que como tercera fuerza mantenían.
En 1997 ningún miembro de la “Sagrada Familia” reclamó la candidatura a la presidencia municipal de Cuernavaca, aceptaron que a nombre de su organización contendiera el joven empresario Sergio Estrada Cajigal, que se registró como militante en 1995, el inicio de la campaña lo realizaron Estrada y Alfonso Pedroza Ugarte, posteriormente se involucró de manera directa el Comité Directivo Estatal encabezado por Adrián Rivera.
Decidieron buscar el triunfo en la capital, y concentraron aquí el trabajo del grupo de jóvenes que habían reclutado desde que fue electo líder estatal de esa organización José Raúl Hernández Ávila y continuado Adrián Rivera Pérez, obtuvieron una diferencia de 400 votos en la alcaldía y un promedio de 100 votos en el segundo distrito con Fernando Martínez Cue como candidato y en el cuarto con Marco Antonio Xicotencatl, en el tercero la diferencia fue de casi mil votos con Erika Cortés Martínez.
El PAN Nacional realizaba una campaña anticipada, a través del gobernador de Guanajuato Vicente Fox, en Morelos el gobernador Jorge Carrillo Olea observó el crecimiento de movimientos ciudadanos, que reclamaban la intención frustrada de impulsar un desarrollo turístico en Tepoztlán y el incremento de hechos delictivos. El gobierno federal ubicó varias propiedades que pertenecían a Daniel Arizmendi López “El Mocha Orejas” y a Amado Carrillo Fuentes “El Señor de los Cielos”, quien falleció el 4 de julio de 1997.
En 1998 desde el congreso se determinó iniciar un juicio político al gobernador priista Jorge Carrillo Olea, en el conflicto se involucraron fundamentalmente el PRD exigiendo su salida y consignación y el PRI buscando mantenerlo en el gobierno, El general aseguró meses después, que Graco Ramírez recibió apoyo del gobierno de Ernesto Zedillo para impulsar las inconformidades en su contra, en aquel proceso mantuvieron la unidad los perredistas.
Cuando finalmente Carrillo Olea presenta a principios de mayo la solicitud de licencia al congreso, los perredistas volvieron a dividirse, el grupo que seguía a Graco Ramírez aceptó la designación de Juan Salgado como gobernador, el comité estatal de Julián Vences determinó rechazar esa propuesta, luego de una semana de negociaciones entre priistas, panistas y perredistas, se determinó que el gobernador para los siguientes dos años fuera Jorge Morales Barud.
El mandatario entrante fue líder del congreso local 1994-97, en esa legislatura fue diputado panista, Adrián Rivera en ese momento era presidente del Comité Estatal, los acuerdos entre el gobierno de reconciliación y el congreso fueron accesibles, durante el conflicto previo a la solicitud de licencia de Carrillo Olea, la bancada panista, de 5 legisladores, mantuvo una posición mesurada, en alguna entrevista Adrián Rivera señaló que “ellos no querían llegar a gobernar sobre ruinas” y por ello mantenían posturas conciliadoras. Los 5 votos que representaban Martínez Cue, Cortés Martínez, Xicotencatl, Ema Margarita Alemán y el coordinador José Raúl Hernández Ávila fueron definitivos para impulsar algunas decisiones.
En ese periodo los conflictos mediáticos se incrementaron y la belicosidad priista y perredista se mantenía en periódicos, radio y televisión. Los perredistas aseguraban que tenían la posibilidad de conservarse como primera fuerza y lograr la gubernatura, en Cuernavaca Sergio Estrada daba mantenimiento a la ciudad con obras de pavimentación, la construcción de un puente, el reordenamiento de la distribución del agua potable y el servicio de recolección de basura.
Los priistas aseguraban que el gobierno municipal panista recibió más recursos del gobierno estatal que los que entregaron al último alcalde priista. En ese escenario los panista determinaron que su candidato fuera el alcalde de Cuernavaca.
Así llegaron a la presidencia de la república y al gobierno estatal en el 2000, con un triunfo en la entidad con más del 55% de los votos, la única diferencia interior que registraron fue la de la candidatura a la presidencia municipal de Cuernavaca, en una asamblea cerrada, por un mínimo de votos, los panistas determinaron que su candidato fuera el ex coordinador de su bancada en el congreso local, ex presidente del partido en el estado y ex diputado federal plurinominal José Raúl Hernández Ávila, al otro aspirante, el diputado local Fernando Martínez Cue, lo enviaron como candidato por el Primer Distrito Federal Electoral. En los resultados de aquella contienda el candidato al congreso logró más votos que el abanderado a la alcaldía.
Martínez Cue determinó salir de la bancada de Acción Nacional, en el 2002 al percibir que no le permitirían ser candidato a alcalde en el 2003. en ese proceso también trascendieron las diferencias entre Jesús Antonio Tallabs Ortega y Adrián Rivera, quienes buscaron la nominación para la alcaldía capitalina, el abanderado fue Rivera Pérez.
En el 2006 el PAN mantuvo la unidad y sin conflictos determinaron que su candidato fuera el entonces senador Marco Antonio Adame Castillo, a la presidencia municipal se envió al ex secretario particular y secretario de gobierno Jesús Giles; como candidatos al senado fueron designados Adrián Rivera y Sergio Alvarez Mata, a la diputación federal por el primer distrito se envió a Enrique Iragorri. En esa contienda se mantuvieron como primera fuerza.
En una decisión atípica, a las pocas semanas de rendir protesta como senador, Sergio Alvarez Mata pidió licencia para integrarse como secretario de Gobierno en la entidad, desde ahí enfrentó el conflicto magisterial por el rechazo del sindicato a incluirse en un acuerdo nacional, signado entre la dirigencia que encabeza Elba Esther Gordillo y el gobierno de Felipe Calderón.
Varios meses de movilización provocaron que cerca de 500 mil alumnos y 22 mil maestros suspendieran labores, el centro se mantuviera “tomado” y se generara un conflicto económico entre empresarios del centro de la ciudad. Alvarez Mata dejó la Secretaría de Gobierno y fue postulado como candidato a alcalde de Cuernavaca, obtuvo 25 mil votos menos que el priista Manuel Martínez Garrigós. En esa elección el PAN se convirtió en la segunda fuerza electoral y sólo mantuvo 3 distritos electorales locales y una decena de presidencia municipales, al Congreso de la Unión sólo llegó por la vía plurinominal el ex alcalde de Cuernavaca Jesús Giles, Alvarez Mata regresó a el Senado.
EL PRI Y SUS CANDIDATOS
Desde que el gobierno dejó de intervenir en la designación de candidatos al interior del PRI, el divisionismo entre la militancia es considerada la principal causa de sus derrotas, en 1997 desde ese partido surgieron 3 candidatos a la presidencia municipal, Ana Laura Ortega Vila logró 37 mil 117 votos para el tricolor, Jorge Pérez Bello registró 25 mil 562 votos para el PRD y el ex diputado local y ex candidato a diputado federal Alejandro Mojica logró 6 mil 545 votos para el PCM. Sergio Estrada triunfó por 400 votos con 37 mil 515.
Para determinar la candidatura a gobernador en el 2000, el PRI realizó una consulta a la base, en la que participaron fundamentalmente dos grupos, uno apoyando a Juan Salgado Brito y el otro al senador Rodolfo Becerril Straffon, durante el proceso, los priistas acabaron distanciados y la estructura que impulsó a Becerril se dispersó o apoyó a otros candidatos, dicen que muchos se fueron a Acción Nacional.
Los priistas incrementaron sus diferencias cuando realizaron otra consulta a la base para determinar quien sería su presidente del comité estatal, por esa organización arribó al Congreso de la Unión como diputada federal Maricela Sánchez y como senador el ex aspirante a la gubernatura David Jiménez González, los contrincantes fueron Víctor Saucedo y la diputada federal Sánchez Cortés. Ésta ganó y conformó su propio grupo, rompiendo con quienes apoyaron su causa.
En el 2003 se dieron 2 conflictos importantes, el comité estatal impulsó a Albino Franco y a Luis Manuel González, para que uno de ellos fuera candidato para el IV distrito federal con cabecera en Jojutla. En una consulta abierta triunfa Rosalina Mazarí, que ahí gana su primera contienda constitucional, junto con Guillermo del Valle, que por el distrito de Cuautla llega a San Lázaro.
El otro fue por la candidatura a la presidencia municipal de Cuernavaca, aspiraban a la nominación Hugo Salgado Castañeda, Rodolfo Becerril Straffon, Diana Recio de Ramos, Jorge Arizmendi, Jorge Meade Ocaranza y Manuel Martínez Garrigós, buscaron diversas formas para determinar la candidatura y acordaron que sería una elección interna, en la cual participaron Jorge Meade y Manuel Martínez, quien finalmente fue el candidato. En esa ocasión en Cuernavaca el PRI fue tercer lugar, logrando 27 mil sufragios, casi mil menos que el PRD con Fernando Martínez Cue.
En el 2005 para la elección de presidente del Comité Estatal manifestaron su intención de participar Manuel Martínez Garrigós, Francisco Moreno, Jorge Trujillo, Víctor Saucedo y Víctor Rubio, otra vez iniciaron negociaciones, buscaron acuerdos, consultaron al comité nacional y determinaron realizar una elección interna en la que participaron finalmente Guillermo del Valle, Francisco Moreno Merino, Jorge Arturo García Rubí y Rafael Zepeda. Quedó al frente de ese instituto político el diputado federal Guillermo del Valle.
En el 2006 volvieron a utilizar el método de elección interna para determinar quien sería su candidato a gobernador. Expresaron intenciones de ser abanderados Juan Salgado, Rodolfo Becerril, el senador David Jiménez, el ex gobernador Jorge Morales Barud, la ex diputada Laura Ocampo Gutiérrez y Maricela Sánchez Cortés. Logró mayoría Sánchez Cortés y en la constitucional quedó en tercer lugar.
En el 2009 manifestaron su intención de ser candidatos a la alcaldía de Cuernavaca Manuel Martínez, Francisco Moreno, Samuel Palma, Jorge Arizmendi y Maricela Sánchez, el CEN, que encabezó Beatriz Paredes, logró que las candidaturas fueran por acuerdo, ubicando a Manuel Martínez como aspirante a la alcaldía, Francisco Moreno a diputado federal por el Primer Distrito, Samuel Palma en tercer lugar de la lista de candidatos a diputados plurinominales, Jorge Arizmendi candidato a diputado local por el primer distrito y Maricela Sánchez candidata a diputado federal plurinominal.
La votación que obtuvo el PRI provocó que ningún candidato a diputado plurinominal priista ingresara al Congreso local. El Tribunal del Poder Judicial de la Federación determinó revocar el dictamen del Tribunal Estatal Electoral, que otorgaba espacios plurinominales a Guillermo del Valle, Laura Ocampo y Samuel Palma. En el proceso federal triunfaron los 5 candidatos priistas, lo que disminuyó los espacios plurinominales para el PRI en la circunscripción, por la cual se propuso a Maricela Sánchez.
En 2010 la renovación del Comité Directivo Estatal fue por elección interna, como en ocasiones anteriores, primero buscaron otras vías. En esa etapa manifestaron su intención Samuel Palma, Víctor Saucedo, Jaime Sánchez Vélez y Julio Espín.
La determinación se pospuso por varios meses, el 7 de noviembre se realizó la elección con 3 fórmulas registradas, la de Amado Orihuela y Georgina Bandera, a la que los priistas denominaron TUCOM (Todos Unidos Contra Maricela), la de Julio Espín y Maricela Sánchez y la de Jaime Sánchez Vélez. En torno a Orihuela Trejo se aglutinaron presidentes municipales y diputados locales.
El resultado fue 47 mil votos para Amado Orihuela y 21 mil para Julio Espín, uno de los compromisos que hizo Amado Orihuela con alcaldes y diputados, fue el no buscar la candidatura a gobernador. La toma de posesión se realizó en el Museo de Cuernavaca, cuando se citó a los priistas en la Plaza de Armas, ahí se colocó una pantalla gigante que difundió la ceremonia realizada en el antiguo palacio municipal, con la presencia de la líder nacional Beatriz Paredes, desde ahí inicio su precampaña que incluyó la colocación de espectaculares en diversos puntos de la entidad.
El lunes se reunieron Manuel Martínez Garrigós, Maricela Sánchez Cortés y Guillermo del Valle. Ahí propusieron que sea mediante elección la determinación de todas las candidaturas del 2012, desde gobernador hasta regidores, ese día el delegado del CEN del PRI José Adalberto Castro dio una rueda de prensa para informar sobre la publicación de la convocatoria para registro de planillas para renovar 907 comités seccionales de ese partido en la entidad, y que la elección se celebrara el 21 de agosto, dejó abierta la posibilidad de registro de planillas de unidad y estableció las condiciones para la realización de la elección interna. Así inicia este partido el proceso para organizar la elección de sus candidatos para la próxima elección.