Este 13 de agosto se cumplieron tres años del estallamiento del conflicto magisterial que dejó a miles de estudiantes sin clases y que colocó a Morelos en el centro de la atención, como laboratorio de aplicación y aprobación de la ACE.
Nicanor Pérez Reynoso, hoy consejal del comité democrático y que en su momento fue integrante de la comisión negociadora del MMB, aseveró que con los años cada vez se ha comprobado, que lo que ellos anunciaban se ha ido cumpliendo, en cuanto a la aplicación de un modelo educativo ajeno a nuestro país, que atiende a lineamientos de organismos económicos internacionales y que –aseveró- a final de cuentas atenta contra los derechos de los trabajadores de la educación y afecta a los estudiantes de los grupos más vulnerables.
Señaló que se ha ido avanzando en la ACE de forma paulatina, con modificaciones que “hacen parecer” que son benéficas para la formación de niños y jóvenes, “pero que en realidad los meten a un esquema extranjero, limita los derechos de educación gratuita y obligatoria”.
Puso como ejemplo la aplicación de evaluaciones como la prueba ENLACE, “que exhibe a los menores, que no es pedagógica, que no considera las diferencias socioculturales y de marginación que existen en México y dentro de Morelos, con instrumentos estandarizados”.
En cuanto a lo laboral, Pérez Reynoso hizo énfasis en que se ha ido atacando los derechos de los trabajadores, pues el concurso de oposición para la asignación de plazas, acusó “es una farsa”, toda vez que su examen tampoco es pedagógico, ni refleja la capacidad de un docente” y remarcó que los maestros no están siendo contratados con los derechos que han tenido los maestros desde hace años.
Enfatizó que la inconformidad de los maestros de Morelos comienza a resurgir, con medidas que entran en la ACE, como la impartición de cursos, que fueron dados, acusó, por gente que no tiene la capacitación suficiente, que no están hechos, como se propuso, por instituciones, con expertos como la Universidad Pedagógica Nacional.
Recordó que hace días hubo protestas de maestros en la zona sur, especialmente porque se envía a directores a cursos que luego serían replicados con sus maestros, dejando de atender los procesos de inscripción y recepción de documentos de padres de familia.
Preparan amparos y manifestaciones
El proceso de reforma en el sistema educativo pactado a nivel federal contempla modificaciones en el programa de Carrera Magisterial, que es una de las principales vías por las que los maestros hoy en día, pueden obtener un incremento sustancial en las percepciones.
Con la reforma, a partir de este año, en la evaluación de puntajes de docentes que buscan ingresar o promoverse en el programa, se considerará en un 50% los resultados de la evaluación ENLACE en los estudiantes del profesor de que se trate, a diferencia de lo que ocurría anteriormente, donde se contaba la evaluación hecha en exámenes a los docentes.
Al respecto revelaron que interpondrán amparos en contra de dichas reformas que contemplan la certificación de los docentes, pues argumentaron, afectan a quienes ya forman parte del programa y que –aseguran- significaría para ellos un retroceso, pues descalifican dichas pruebas o sistemas de evaluación. A decir de los inconformes, esta certificación iría en contra de las condiciones generales del trabajo.
Pérez Reynoso adelantó que ya preparan una marcha en contra de dichas reformas para el próximo 20 de septiembre, desde Chipitlán hasta el zócalo de Cuernavaca para demandar que este proceso sea suspendido en el estado.
“Estamos en contra, estas modificaciones van en contra del principio de bilateralidad entre autoridad y trabajadores, pues se supone que para ello había una comisión mixta SEP - SNTE y resulta que quien va a determinar si un maestro accede o no, es una empresa privada que haría la llamada certificación”, sostuvo.