La presidenta de la agrupación, Adriana Espinosa Velasco, dijo que estarían de acuerdo en que la Cámara de Diputados apruebe fondos que colaboren a reducir o aligerar la carga que pesa sobre las aportaciones económicas voluntarias que hacen los padres cada año. Pero no, explicó, como lo hicieron en la ocasión anterior, a través del fondo de combate a la pobreza donde se etiquetaron los recursos en razón de 180 pesos por alumno matriculado para la compra de algunos materiales.

Cabe recordar que al final se entregó por esta vía sólo la mitad de los alrededor de 60 millones de pesos.

Espinosa Velasco dijo que el Congreso podría ayudar a ir erradicando las llamadas cuotas o apoyos económicos, pero con la aprobación de esquemas que permitan pagar a las personas que prestan el servicio de limpieza en los planteles, lo cual es uno de los aspectos más costosos o al que se le destina la mayor cantidad de dinero.

Señaló que podrían dejar un monto específico para el pago de conserjes, vigilantes, bibliotecarios o mantenimiento, pues hay escuelas grandes donde se tiene contratado de planta a una persona que se dedica sólo a eso.

El instituto, opinó, tendría que encontrar alguna forma para absorber ese gasto, si no es mediante el incremento de la nómina, pues a través de la contratación de una empresa o un tercero que brinde dicho servicio.

Recordó que hay muchas escuelas que no tienen ni un solo conserje contratado por el IEBEM y casi todos son pagados por los padres de familia. Estimó que en cada escuela por lo menos cuesta 30 mil pesos al año el pago de sueldo de una persona que haga esas labores de limpieza. A eso, dijo, se suma los pagos que se hacen para la operación de las supervisiones escolares.

Espinosa Velasco informó que en el ciclo escolar pasado se estima que las aportaciones económicas de padres de familia ascendieron a por lo menos 32 millones de pesos, que es lo que se tiene registrado ya que muchas veces no se rinde cuentas detalladas a la AEPAF porque en muchos planteles ese dinero no lo reportan en gastos de mantenimiento sino como otros gastos. De esos 32 millones de pesos por lo menos la mitad se destina al multicitado rubro de pago de personal de limpieza y mantenimiento.