Los días más difíciles de transitar por Plan de Ayala fueron el sábado y el domingo, porque se registró una gran afluencia de visitantes, principalmente del Distrito Federal.
A decir de los elementos de tránsito, los fines de semana en la avenida son caóticos, pero en vacaciones mucho más. Estos días de asueto no fueron la excepción, el tráfico fue mucho más conflictivo tanto así que para atravesar toda la vía un coche se tardaba 40 minutos o más.
Por esa misma razón, se colocaron policías en los cruceros, para ayudar hacer más ágil el tránsito vehicular, pues en ciertas horas los semáforos permanecieron intermitentes, como es normal en días de descanso para la mayoría de la gente en la capital.
“Es difícil pasar por aquí, más cuando hay ruteros impacientes o gente difícil que viene buscando pleito. Pero no nos queda de otra, tengo que llegar a mi casa, y es mi camino de paso”, dijo Manuel, vecino de Jiutepec, quien trabaja en una escuela del centro de Cuernavaca.
En situaciones como las del fin de semana largo, la ciudadanía que padece del tráfico, coincide en que se requiere de una solución alterna a Plan de Ayala. “Que se abran más calles, se construyan segundos pisos, o lo que quieran, pero a Cuernavaca ya no le caben los vehículos que hay”, dijo Raúl Soto, ciudadano de la capital morelense.
Los fines de semana, por lo regular, menos unidades del transporte público colectivo circulan, pues los pasajeros son menos al no haber clases, sin embargo, aumentan los autos particulares tanto de morelenses como de turistas que utilizan más las calles de Cuernavaca.