El coordinador del grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN), Luis Miguel Ramírez Romero (quien ejerció el control del Congreso en el periodo ordinario anterior) aseguró que durante un año las finanzas del Poder Legislativo del Estado debieron cubrir gastos no considerados dentro del presupuesto, debido a que algunos diputados sobrepasaron el número de trabajadores de confianza.
Por lo anterior, aseveró que es urgente que a principios de 2012 todos los diputados hagan una revisión en sus nóminas, a fin de reducir sus gastos a más de la mitad. De lo contrario, el Poder Legislativo no podrá soportar ese gasto –aseguró- sobre todo cuando se dará el cierre de legislatura y tendrá que entregarse cuentas a la nueva administración que llegue en septiembre del próximo año.
“La reducción de la nómina es necesaria desde hace un año, porque hubo una inflación terrible en las nóminas principalmente del PRI. Es urgente una depuración del mismo; no sabemos de cuánto porque eso lo tiene la conferencia. Pero es necesario que se dé”, apuntó.
Ramírez Romero reconoció que las finanzas del Congreso del Estado están expuestas a los intereses de los diputados sin que haya un control de las mismas, por lo que adelantó que se buscará un acuerdo a fin de poner “candados” en el manejo de los dineros de la Cámara de Diputados.
“No estaremos permitiendo que las finanzas del estado se utilicen para campaña y el Congreso se convierta en la caja chica de los partidos políticos”, aseveró el coordinador de los diputados panistas, quien tuvo bajo su mando los instrumentos de control.
El panista refirió que los problemas financieros que enfrenta el Congreso del Estado se deben al mal manejo que hicieron algunos diputados cuando “inflaron” su nómina y se aprobaron viajes costosos, así como otros gastos no considerados en el presupuesto del Congreso local.