Indicaron que la asignación de toda clase de negocios a los hijos de quienes gobernaban en el sexenio 88-92, así como la protección a figuras públicas terribles –como Apolo Bernabé Ríos García, autor de múltiples asesinatos, o Plácido Arzimendi, invasor profesional de tierras y también encauzado por homicidio y prófugo de la justicia- provocaron el hastío de la ciudadanía.
Indicaron que el nombre de Flores Ruiz está ligado al rivapalacismo y este a su vez con lo peor del viejo PRI, por lo que de darle la candidatura a una diputación local provocará una amplio rechazo que castigará en las urnas a ese partido.
Por lo anterior, indicaron, promoverán actos de protesta, para impedir que se consume el nombramiento y se rectifique a fin de que la recuperación electoral del tricolor de la que tanto se hable no se vea amenazada por el pago de cuotas a los grupos de control de ese partido.