“El actual Ayuntamiento ha iniciado un proceso de re-negociación y reestructuración de las deudas que se tienen contraídas con instituciones bancarias. Son varias las instituciones que están inmersas en esta situación de presión financiera, porque el 84 por ciento de las participaciones que llegan al Ayuntamiento están comprometidas, es decir, que éstas van a parar a un fideicomiso del cual se cobran los bancos acreedores y lo que sobra se lo dan al Ayuntamiento. Actualmente se deben alrededor de 600 millones de pesos al Banco del Bajío; 37 mdp a Bancomer, 160 mdp a Mifiel por luminarias para el municipio; 30 millones a Banorte por cadenas productivas, de pago a proveedores y un empréstito más pequeño al banco HSBC de ocho millones de pesos”, detalló Morales Barud, lo cual suma 835 millones de pesos.
Ahora bien, prosiguió, la pretensión es que al pagarle a Bancomer y al HSBC se puedan liberar compromisos para poder disminuir este 84 por ciento, a un 47 por ciento y tener recursos que permitan al Ayuntamiento proveer de los recursos públicos municipales necesarios a los cuernavaquenses.
Bajo este panorama, el ex gobernador del estado señaló que tiene pensado también trabajar con el tema del impuesto predial, para lograr recaudar más y lograr con ello, dar mejores servicios a la ciudadanía que vive en la capital del estado, “quiero que las colonias sepan cuánto se paga de predial y que ese dinero recaudado sirva para seguridad y otra parte para lo que la propia ciudadanía considere en materia de servicios públicos y obras en beneficio de las comunidades (banquetas, alumbrado, mejoramiento de parques, etc.) y en la medida en que vean resultados, estoy seguro que habrán de sumarse más para pagar su predial”, por lo que estimó que para junio del próximo año, ya tendrán información más clara de cuánto se recauda en esta materia para poder definir con más detalle el porcentaje para seguridad, así como para servicios y obras.