Con pifias legislativas e incongruencias jurídicas, el Congreso del estado aprobó la prohibición del uso de animales en circos, mediante una reforma a la Ley Estatal de Fauna que fácilmente podría ser revocada. El principal interesado en que la medida se aprobara fue el diputado Jordi Messsguer Gally, debido a que su pareja sentimental participa en un grupo cuyo principal objetivo es prohibir el uso de animales en los circos.
El desconocimiento de los diputados locales los llevó a aprobar una reforma que se contradice con la ley en general. Así lo advirtió el diputado Carlos de la Rosa Segura durante su intervención en la máxima tribuna, previo a la votación del dictamen.
"Estamos actuando contra natura de la norma. Esto implica que estamos votando un dictamen que el día de mañana con la mayor tranquilidad del mundo y ante un amparo lo van a revocar", aseveró el diputado perredista.
Explicó que la norma aprobada se contrapone entre sí, pues por un lado se prohíbe el maltrato animal y se hace referencia a la tauromaquia en uno de los artículos de la ley en referencia y en la modificación aprobada (artículo 12 específicamente) sólo se determina la prohibición del uso de animales en circos y se excluye al resto de los espectáculos.
Incluso, la diputada Erika Cortés Martínez aprovechó la postura del también abogado para pedirle asesoría inmediata y le cuestionó qué sería lo correcto en el caso, con finalidad de que se pudiera cumplir con el objetivo, terminar con el maltrato animal, sin caer en errores.
En respuesta, el diputado de la Rosa Segura insistió en que tendría que abordarse el problema en general y prohibir el maltrato animal en circos, corridas de toros, peleas de gallos y todos aquellos eventos en los que se ponga en riesgo la integridad física de diferentes especies.
La diputada Erika Hernández Gordillo, del Partido Nueva Alianza, fue la primera en cuestionar a sus homólogos si verdaderamente están en contra del maltrato animal y cuestionó por qué no legislar también para prohibir el uso de animales en otro tipo de espectáculos. "¿Realmente sí estamos votando porque se erradique el maltrato hacia los animales? Erradicación hacia los animales son charreadas, becerros, peleas de gallos, eso es evitar el maltrato animal, no solamente en los circos. Eso quedará en el voto de cada uno de nosotros".
La panista Amelia Marín Méndez afirmó que en torno a la discusión y votación de la reforma en comento existieron "intereses oscuros", como por ejemplo, lograr que los circos con animales ya no llegaran a Morelos y sí otro tipo de espectáculos.
"Estas reformas requieren de un mayor análisis, buscando un interés general y no sólo busquen afectar a los circos que tradicionalmente vienen a nuestro estado, que quienes están de cuestiones relacionadas con la fauna nombren una comisión que inspeccione y verifique que los circos que trabajen en nuestro estado se evite cualquier maltrato a los animales", manifestó.
A pesar de la exposición jurídica por parte del abogado De la Rosa Segura y de la oposición de sus homólogas, la mayoría de los diputados que se manifestaron a favor de la reforma, afirmaron que lo aprobado es un avance para evitar el maltrato animal en Morelos, pues la prohibición de la tauromaquia y otros espectáculos no ha sido socialmente aceptada.
Tanto el panista Javier Bolaños Aguilar como el priista Manuel Agüero Tovar coincidieron; afirmaron que si bien la reforma sólo afecta en lo particular a los circos y no en lo general, sí significa un paso para evitar el maltrato animal en Morelos.
Finalmente, 22 diputados se impusieron ayer en el Congreso local y aprobaron la reforma a la Ley Estatal de Fauna, para prohibir el uso de animales en entretenimientos circenses.
El pleno del Congreso local aprobó con 22 votos a favor de reformar el artículo 13 y la fracción VII del artículo 69, además de una adición al segundo párrafo del artículo 12 y al artículo 69.
Entonces, la modificación a la legislación antes referida, determina la prohibición del uso de animales en espectáculos públicos o privados, "cuando dicha utilización sea para infringir maltrato intencional al animal, ocasionándole afectaciones en su integridad física,…".
Además, se determinan sanciones para quienes infrinjan la legislación, que van desde mil 500 (94 mil 500 pesos) a dos mil días (157 mil pesos aproximadamente) de salario mínimo vigente y arresto por 36 horas.