El titular del organismo, Sergio Octavio García Álvarez, aseguró que estos operativos y el aseguramiento de los alimentos están sustentados en los acuerdos firmados entre las autoridades federales y estatales de Educación y Salud, y a su vez con la Comisión Federal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Desde finales del año escolar pasado se informó sobre la determinación del gobierno –en ambos niveles– de actuar de manera directa para conseguir que por fin se cumplieran los "lineamientos generales para el expendio y distribución de alimentos y bebidas preparados y procesados en las escuelas del Sistema Educativo Nacional", que se aprobaron y publicaron, en su primera fase, desde el sexenio pasado y que no habían sido respetados al 100 por ciento en todas las escuelas.
Hay que recordar que estas medidas se adoptaron, con vigencia para todo el país, ante el panorama que ubicó a México en el primer lugar a nivel mundial en obesidad infantil.
Además, de medidas tales como el obligar a las empresas que producen alimentos a dar información detallada sobre contenidos en los empaques, de la prohibición de la publicidad de estos productos en horarios de programación infantil en televisión y otras disposiciones, el gobierno federal ordenó acciones claras para hacer cumplir dichos lineamientos. Incluso se firmó un compromiso entre la SEP y las secretarías de Educación de todos los estados de la república, para que junto con la Cofepris se trabajara en este rubro.
En Morelos no se había dado cuenta del cumplimiento de dichos compromisos. Finalmente, el titular de la Coprisem informó que en este ciclo escolar iniciaron los operativos de verificación en los centros educativos.
Detalló que conforme a las disposiciones oficiales, la estrategia está conformada por tres actividades específicas: "corroborar las condiciones físico-sanitarias de la Cooperativa Escolar y/o el área de preparación y venta de alimentos, verificar las prácticas de higiene en la preparación de alimentos y ratificar el expendio de alimentos permitidos por la normatividad".
Informó que en las primeras visitas ya se aseguró un total de tres mil 211 productos que conforme a los citados lineamientos, está prohibida su venta en el interior de los centros educativos.
El comisionado aseguró que las revisiones se hacen de manera conjunta con autoridades de los planteles y del Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos.
Atendiendo que el universo es de más de mil 800 escuelas de nivel básico en el estado y la disponibilidad de personal de la comisión, se tiene previsto realizar un total de 100 visitas a diferentes escuelas, en total, desde el inicio del ciclo escolar hasta el mes de diciembre próximo.
Cabe recordar –como se informó con oportunidad– que el propio comisionado explicó que de acuerdo con la normatividad, se hacen las verificaciones, se notifica a la autoridad correspondiente, en caso de encontrar alguna anomalía y si hay reincidencia, incluso la norma contempla la posibilidad de cerrar o "clausurar" las cooperativas escolares.
García Álvarez destacó que además de las verificaciones, se trabaja en la orientación e información sobre higiene y nutrición a las personas encargadas de la preparación, manejo y expendio de alimentos y bebidas en las escuelas, con el propósito de ir generando la cultura de cuidado a la salud de los estudiantes.
El objetivo –destacó– es generar hábitos saludables; no cerrar o sancionar, sino convencer a la comunidad estudiantil de los resultados positivos que puede tener el que los niños y niñas consuman productos más sanos y que esta cultura la lleven a su vez a los hogares.
De igual forma, el titular de la Coprisem insistió en que es fundamental la participación de los ayuntamientos de los 33 municipios del estado para que en el ámbito de sus competencias, eviten que en la periferia, a las salidas de las escuelas, no se permita la venta de productos conocidos como "chatarra", a fin de cerrar este círculo de promoción de buenos hábitos de alimentación en el entorno escolar.
Hasta la fecha no se ha concretado sanciones para el personal docente o para manejadores de cooperativas escolares, como lo marca la norma, según las autoridades educativas.