El fiscal al medio día de ayer se reunió con los diputados que integran la Comisión de Justicia y Derechos Humanos, en donde admitió que desconoce el avance de las investigaciones sobre el narcotráfico en Morelos y los homicidios cometidos por algunos de sus sicarios, así como la posible vinculación de servidores públicos con la delincuencia organizada.
Y es que el diputado Fernando Martínez Cué refutó al procurador, porque señaló que gracias a las investigaciones realizadas en Morelos se alertó a la DEA, en los Estados Unidos, que morelenses vivían en condiciones de esclavos en un racho ubicado en California.
“Que bueno que dice usted eso señor procurador, porque también la DEA ha dicho que hay funcionarios morelenses involucrados con el crimen organizado”, afirmó el diputado.
El fiscal manifestó que oficialmente no tiene ninguna información en ese sentido, pero tampoco conoce los avances de las investigaciones realizadas por la PGR, “como usted sabe son trabajos que hace la Federación, pero si usted así lo considera pertinente mandaré un oficio, y ojalá ustedes como Congreso también lo hagan y que nos den la información”, comentó el procurador.
Antes, el diputado perredista Fidel Demédicis Hidalgo pidió a los legisladores no romper el orden de la comparecencia, pues con anterioridad se acordó que el funcionario iba a ser sometido a un interrogatorio previamente elaborado.
El líder parlamentario del PRI, Jorge Arizmendi García, más que preguntarle al funcionario le reclamó el maltrato que reciben las víctimas de delitos, “que tienen que pasar por un doble viacrucis, pues primero lo que les han hecho, y después sufren por el maltrato que reciben en las agencias del Ministerio Público”.
La perredista Hortencia Figueroa Peralta comentó que a su oficina han llegado quejas porque han sido despedidos psicólogos, cuya función es ayudar a las víctimas de delitos, pero Benítez Vélez le explicó que estos profesionistas no fueron despedidos sino removidos a las agencias del Ministerio Público Prototipo, para que sea ahí donde se atiendan a los que así lo necesiten.
“No se dio de baja a nadie, sino que ahora las personas que son atendidas no tienen que trasladarse a Cuernavaca, sino directamente a donde está el agente del ministerio público”, afirmó el funcionario.
El procurador también abordó el asunto de los proceptores (camilleros) del Servicio Médico Forense (Semefo), que levantaron el cadáver de Arturo Beltrán Leyva, alías el “Jefe de Jefe”, el pasado diciembre.
“Fueron reinstalados, pero claro, con sus reservas de ley, porque se continúa con la investigación que dirá si fue manipulada o no la escena del crimen”, dijo.
El procurador comentó que los empleados del Semefo toman cursos especializados para no enfrentar nuevamente ese tipo de problemas, pues fueron acusados de manipular la escena del crimen y filtrar una fotografía en la que aparece “El Jefe de Jefes” con los pantalones abajo, en un charco de sangre, y con billetes de varias nominaciones encima de su cadáver.
La comparecencia inició a la hora acordada (11 horas) y duró más de tres horas, sin embargo, todas las preguntas hechas por los diputados fueron contestadas por el funcionario.