Más de una docena de autobuses que prestan servicios para viajes a destinos turísticos, se quejaron que cerca de 300 autobuses podrían dejar de operar si la Secretaría de Comunicaciones y Transportes se niega a la renovación de permisos.
Es que la SCT les ha negado los permisos, porque todos los autobuses tienen una antigüedad mucho mayor a 10 años, cuando la ley impide que presten servicio unidades viejas y en malas condiciones.
Sin embargo, el delegado de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas A.C., Pedro García Pérez, aseguró que los vehículos se encuentran en buenas condiciones para realizar viajes a cualquier destino.
Además, comentó que la SCT no sólo asegura que los autobuses son antiguos, también exige una serie de trámites, a su parecer innecesarios, para que consigan los permisos del servicio público, por lo que demandó a la dependencia federal actuar de manera imparcial y no intentar beneficiar a unas cuantas empresas.
Los transportistas inconformes también reclamaron al gobierno federal congele los precios del diesel, porque ha golpeado fuertemente a su economía, a raíz de los últimos aumentos en las tarifas de combustibles.
El delegado de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas señaló que el diesel es el combustible que forzosamente compran los operadores de autobuses, por lo que es difícil evitar el daño a la economía de los agremiados de su agrupación y al transporte en general.
Después de manifestarse en el Libramiento Cuernavaca, los transportistas se trasladaron a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para buscar una respuesta a sus demandas.