La defensa del joven del cuarto semestre de la Universidad Tecnológica Emiliano Zapata (UTEZ), denunció que la única prueba que obra en contra del estudiante de apenas 20 años, es una huella digital que fue encontrada en un automóvil tipo Mini Cooper, modelo 2012, propiedad de la víctima, y que según el abogado, el joven pretendía comprar.
En el juicio oral en contra del médico con maestría en infectología, se anexó una prueba que demuestra que el muchacho fue becado por el gobierno del estado para estudiar en una universidad pública en Japón, en donde junto con otros ocho compañeros reforzarían sus conocimientos en robótica.
Desde la audiencia intermedia el abogado del joven afirmó que hay una prueba que calificó como vital para demostrar la inocencia de su defendido, pues anexó un video que demuestra que el día de los hechos el imputado se encontraba en su salón de clases, además de que anexó una carta de la rectoría de la institución que así lo avala.
“Demostraré plenamente que mi representado no pudo haber participado en el plagio, pues ese día se encontraba en clases, y para demostrarlo plenamente, se anexa como prueba un video”, agregó el defensor en la audiencia intermedia al dar a conocer públicamente las pruebas que presentará en el proceso.
Y es que el médico al rendir su declaración el pasado lunes ante un Tribunal de Juicios Orales relató que el día de los hechos salía de su casa pasadas las 7 de la mañana, a bordo de su automóvil marca BMW Mini Cooper cuando fue interceptado por seis sujetos que viajaban en un Jetta Bicentenario, mismos que lo llevaron a un departamento en una unidad habitacional de la colonia Alta Vista, al norte de Cuernavaca.
Relató que lo golpearon y que su esposa entregó, para obtener su liberación, los papeles del Mini Cooper, y un automóvil Jetta marca Volkswagen, así como 30 mil pesos en efectivo.
En el caso del joven que estuvo a punto de estudiar en Japón su defensor insistió que el día en que se pagó el rescate el estudiante fue a lavar su automóvil, cuando un conocido se ofreció a venderle el lujoso automóvil, pidiéndole a cambio 100 mil pesos y la entrega de otro carro tipo Bora.
Justo cuando observaba el carro que le ofrecieron fue cuando llegó al autolavado, en la colonia Alta Vista, la Policía Preventiva Municipal que lo detuvo.
El pasado lunes el médico declaró e identificó a cada uno de los seis detenidos, incluido el estudiante, como las personas que lo golpearon y secuestraron, pero dicha prueba fue combatida por los abogados de los detenidos pues se demostró que la víctima utilizó documentos en donde se narraban el papel que se presume jugó cada uno de los detenidos en el plagio.
Finalmente hoy será la última oportunidad que tendrán los defensores y la Fiscalía, pues asistirán a declarar peritos y testigos a las 12 horas en la Primer Sala de Juicios Orales, y se cerrará el periodo de pruebas para que los tres jueces den a conocer la sentencia.