Comerciantes de la calle Ricardo Linares denunciaron que luego de que concluyera el proyecto de remodelación “Cuernavaca, corazón de todos”, ni el gobierno estatal ni el municipal han realizado los trabajos de mantenimiento prometidos. Por el contrario, sigue habiendo daños en el alumbrado eléctrico y en el sistema de alcantarillado.
Bertha Zárate, comerciante de dicha calle, que se ubica entre las avenidas Álvaro Obregón y Morelos (a la altura de El Calvario), explicó que las salidas de desagüe de las casas y comercios quedaron tapadas después de la obra, por lo que en tiempos de lluvias se inundan los comercios.
Además, indicó que las esferas que pusieron para adornar la calle se están desprendiendo del suelo, lo que pudiera provocar graves accidentes. “Están puestas mal, las bolas ésas, y han provocado accidentes tremendos; inclusive hasta pueden matar a alguien porque salen las bolas disparadas contra la gente y nada más la gente se hace a un lado. Entonces, hasta que no pase algo fuerte, hasta entonces van a venir las autoridades”, refirió la comerciante.
Lamentó que esta obra nunca fuera inaugurada, pues hay partes inconclusas y se ha ido rompiendo la pavimentación de la calle, así como han caído automóviles a las alcantarillas que se encuentran rotas.