En la explanada de la Torre Universitaria de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) se realizó la “Noche Estelar”, con el objetivo del interés por la ciencia en niños y adultos, en específico por la astronomía.
Edna Galindo –organizadora de esta actividad– explicó que la Dirección de Comunicación Intercultural de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), en coordinación con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), realizaron la “Noche Estelar” para “hacer comunidad, transformar el conocimiento e impulsar vocaciones científicas. Ésta es una fiesta astronómica donde se comparte con la comunidad universitaria y sociedad en general la pasión por la ciencia”.
La noche de este año contempló diferentes actividades como la observación astronómica, zanqueros, talleres para niños y jóvenes, concurso de disfraces cósmicos, planetarios móviles, juegos de lógica, cuentacuentos, exposiciones, ensambles musicales y diferentes conferencias con temas distintos como “Viaje al centro galáctico”, “La astronomía prehispánica en Mesoamérica” y la conferencia magistral “Luz una viajera estelar”.
“En esta ocasión decidimos ver el sol desde las cinco de la tarde; nos parecía una oportunidad maravillosa para que la gente pudiera ver a la única estrella, la estrella del sistema solar, hay una mancha solar y eso es algo que no se ve todos los días. Otra cosa nueva es que pusimos una exposición de ciencia de Luis Mochan que se llama ‘Luz en movimiento’ en la galería Víctor Manuel Contreras, además de cinco conferencias sobre la ciencia, no necesariamente del tema astronómico”, dijo Edna Galindo.
Se reportó una asistencia de más de dos mil 500 personas y este año, a diferencia de los anteriores, se incluyó un planetario mecánico, que consiste en un cilindro perforado con un foco y que proyecta una luz sobre el domo que genera o modela las constelaciones que se ven en el hemisferio norte.
Edna Galindo comentó que uno de los objetivos de esta noche estelar es hacer atractiva la ciencia para los niños, e informó que los telescopios utilizados fueron prestados por el Museo de las Ciencias Universum de la UNAM, por el planetario Felipe Rivera de Morelia, la Sociedad Astronómica Nibiru y aficionados.