Nava Castillo expone que ha sido una cuestión electorera el no tasar las medicinas y los alimentos con un 10% de IVA en lugar de la actual tasa cero, y es un mito que vaya a tener repercusiones para la gente que menos tiene, ya que quienes se benefician con esta exención son las grandes cadenas farmacéuticas y empresas refresqueras y de diversos alimentos, “tan es así, que de acuerdo a las cifras que tiene la Secretaría de Hacienda (SHCP), en el 2009 hubo saldos a favor por 200 mil millones de pesos para estos grandes consorcios”.
Asimismo, explicó que estudios de instituciones especializadas en finanzas, señalan que la clase vulnerable del país come alimentos que se venden en el mercado o en comercios en pequeño que de por sí no pagan IVA.
En cuanto a las medicinas, o utilizan la herbolaria, o bien tienen Seguro Popular o les son dotadas por los centros de salud y tampoco representaría un costo alto para ellos que estos productos tuvieran el 10% de IVA.
“En todos los países de la Unión Europea y en Estados Unidos la carga tributaria recae en el consumidor final y con ello se llega a la premisa de que paga más el que más tiene y consume. Los pobres no comen pescado, carnes, ni compran medicamentos caros. La clase media o los obreros no se verían tan afectados, porque además hablar de un 10% no es agresivo para ellos. Pero hablar que hay una tasa del 15 y ahora del 16% de IVA, psicológicamente hace que los contribuyentes, que en su mayoría son la clase media, traten de evadir los impuestos”.
Históricamente hay registros que datan de 1980 al 2009, por parte de la SHCP, donde se ha recaudado más cuando ha existido este impuesto del 10%, que ahora está con el 15 y el 16; o en su momento del 20% en la época de Miguel de la Madrid.
Por ello, dijo Nava Castillo, la propuesta es como lo hizo en su momento Coparmex a nivel nacional de manera muy parecida, para que no existan tasas diferenciadas en todo el país sino un solo Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 10%, incluidas medicinas y alimentos.
Que el Impuesto Sobre la Renta (ISR) sea del 25% y no del 30, como ahora; y que desaparezca el IETU del 17.5%.