Obesidad, estrés, ansiedad, dormirse tarde, levantarse tarde y estar pegados al televisor, la computadora o el celular, principales factores de riesgo: neurólogo.
La Asociación Mundial de Medicina del Sueño (AMMS) estima que los trastornos para dormir afectan a 45% de la población planetaria.
Recomienda ISSSTE medidas de higiene del sueño para prevenir daños.
El ISSSTE hace un llamado a la población derechohabiente a fomentar buenos hábitos de sueño y tener un descanso reparador, ya que gran cantidad de problemas de salud están relacionados con no dormir o dormir mal, ejemplo de ello es su impacto en el descontrol exacerbado de las enfermedades crónico-degenerativas y en los accidentes automovilísticos.
De acuerdo a un estudio realizado por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (AMMS), se calcula que las alteraciones del sueño afectan a 45% de la población planetaria, mientras que el insomnio de tipo transitorio, que es la forma más común de estos trastornos afecta a 95% de los adultos por lo menos una vez en su vida.
Al respecto, Noel Isaías Plascencia Álvarez, neurólogo del Centro Médico Nacional (CMN) “20 de Noviembre” del ISSSTE, precisó que “no dormir implica tener complicaciones que nos pueden hacer tener problemas cardiovasculares como infarto al miocardio y arritmias cardíacas; problemas vasculares cerebrales; y niveles de glucosa elevados en pacientes diabéticos”.
Con respecto a los efectos de estos trastornos en el ánimo de las personas, el especialista explicó que “cuando una persona acumula varias horas sin poder dormir adecuadamente, lo primero que ocurre es que empieza a tener cambios en su conducta, se pone irritable, no puede concentrarse y si se priva del sueño por varios días la gente comienza a tener comportamientos agresivos, pueden tener alucinaciones e incluso morir por arritmias cardíacas”.
Plascencia Álvarez refirió que también hay causas patológicas de trastornos del sueño, la más importante es la denominada apnea obstructiva del sueño, un problema asociado a la obesidad que se caracteriza porque al dormir las personas se cierra la tráquea impidiendo la entrada de aire a los pulmones, los pacientes literalmente dejan de respirar varios segundos y ante la falta de oxígeno emiten un fuerte ronquido para volver a jalar aire.
Dado que México, de acuerdo al UNICEF, ocupa a nivel mundial el primer lugar en obesidad infantil y el segundo lugar en sobrepeso en adultos, atender los trastornos del sueño se vuelve un asunto de la mayor importancia, señaló el especialista.
Ante la presencia de estos problemas, el neurólogo del ISSSTE recomendó aplicar reglas de higiene del sueño, como son: dormir de preferencia en la noche, cuando se oculta el sol, que es lo fisiológicamente natural; dormir en una habitación confortable, sin ruido, sin luces; ir a la cama cuando se tenga sueño, pues si se acuesta sin tener sueño genera mucha ansiedad y será más difícil dormir; si no se concilia el sueño es mejor levantarse y leer un libro en la sala hasta que el propio cuerpo demande acostarse.
Sugirió antes de dormir evitar actividades que propicien mayor estado de alerta, por ejemplo: no ingerir cenas fuertes, no consumir mucha agua, no fumar, no ingerir alcohol, no tomar café o refrescos de cola y no ver tele o usar computadora o celular.
No obstante, si después de aplicar estas recomendaciones los problemas persisten, es importante acudir al médico para realizar un diagnóstico adecuado y su tratamiento, concluyó el especialista.