A pesar de los operativos realizados contra unidades irregulares, líderes transportistas afirmaron que vehículos de las agrupaciones referidas operan de forma irregular y no se les ha detenido a la mayoría y a las que sí son liberadas inmediatamente.
Aurelio Carmona Sandoval, dirigente de Rutas Unidas, hizo referencia a los permisos que la Dirección de Transportes otorgó a Aliados de Morelos y Generación 2000 para prestar el servicio público, dijo que a su parecer esos documentos no debieron darse, cuando la Ley de Transportes es clara e impide que operen unidades sin concesión (placas).
El líder transportista aseveró que los dueños de las unidades irregulares deberían ser sancionados por la Dirección de Transportes y evitar que operen, porque entonces propicia que más personas incurran en estas faltas.
Confió en que la dependencia estatal continúe con los operativos de supervisión para detener a los microbuses y camiones de las dos agrupaciones, tal y como se han emprendido en contra de las unidades “chatarra”.
“Sabemos que sí se han hecho operativos pero contra las unidades viejitas, a nosotros nos detuvieron dos. Nosotros insistiremos en que se persiga a las de esas agrupaciones, porque aunque tengan permisos, esos permisos no deberían haberse entregado, va contra la Ley de Transportes”, añadió.
Aliados de Morelos cuenta con 24 unidades, las cuales no tienen juegos de placas y según su líder acordó con la Dirección de Transportes un permiso temporal en tanto se resuelve su situación legal, un conflicto originado por otros particulares que alegan la titularidad de las concesiones.
En el caso de la agrupación Generación 2000 son cerca de 20 de 35 unidades las que -supuestamente concesionarios inconformes- no están en regla desde hace varios años y que han operado con la complacencia de las autoridades.