Con amenazas de despidos, unos 60 transportistas que estaban en paro desde la noche del viernes en las instalaciones de Pemex de Cuernavaca, finalmente descargaron la gasolina que transportan y suspendieron su movilización
Después de casi tres días de mantener bloqueadas las instalaciones de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Cuernavaca, este domingo por la tarde transportistas de combustible decidieron suspender la protesta que realizaron por descuentos derivados de faltantes y descargar el producto.
Se espera que la afectación en la distribución a las estaciones de servicio sea mínima.
Los conductores de pipas que laboran para empresas subcontratadas por Pemex, como la denominada Flensa, protestaron desde la noche del viernes, el pasado sábado y este domingo, debido a que les han cobrado “faltantes” en la carga, pero ellos aseguran que las cantidades que son cargadas en las pipas son marcadas por las máquinas que se usan para este proceso.
Marco Antonio Zamudio Servín, uno de los inconformes, explicó que ellos sólo traspasan desde la planta de Pemex de Acapulco a las instalaciones de Cuernavaca ubicadas en el boulevard Cuauhnáhuac y otras pipas llevan el producto a las gasolineras.
Los manifestantes señalaron que se usan equipos muy antiguos que no tienen mantenimiento y tampoco cuentan con herramientas, por lo que no se les podría responsabilizar de esos faltantes, pero sí se les cobran.
Zamudio Servín dijo que -por ejemplo- un día antes, en el momento de descargar le reportaron que le faltaban 250 litros, lo cual calificó como imposible.
Además, le cobran el litro a precio de venta al público, en promedio 20 pesos por cada uno.
Expusieron que su sueldo en general es de dos mil pesos por viaje de Acapulco a Cuernavaca y en dicha ocasión ya le registraron un descuento de cinco mil pesos, que asegura es injusto porque ellos no tendrían responsabilidad alguna.
“Desde siempre nos han descontado faltantes, pero ahorita ya es una cosa exagerada, por eso lo que queremos es que cumplan con traer otras máquinas y que nos dejen descargar sin descuentos” expresaron, al referir que en esta terminal hay otros problemas que no ven en otras plantas, como por ejemplo sanitarios sucios, sin agua, y no les permiten usar los baños del personal”.
Dijeron que este domingo al menos sesenta transportistas estuvieron en paro y no descargaron gasolina.
Aunque estaban dentro de las instalaciones de Pemex, se negaron a dejar el hidrocarburo hasta conseguir un acuerdo sobre los descuentos y que se garanticen medidas para que no siga sucediendo lo mismo.
Sin embargo, a decir de los manifestantes, las autoridades de Pemex les ordenaron salir de las instalaciones, por lo que tuvieron que permanecer en el bulevar Cuauhnáhuac, con los riesgos que eso conlleva, pues están cargadas con combustible.
Señalaron el peligro que viven de ser objeto de la delincuencia, porque hace algunos años les robaban las unidades en la entrada a Jiutepec, cuando llegaban al semáforo, momento en que los abordaban y les quitaban la pipa con todo y el hidrocarburo.
Las pipas continuaban estacionadas hasta el mediodía de ayer en el referido bulevar Cuauhnáhuac y otras en la autopista México-Acapulco cerca del acceso a Cuernavaca, pero por la tarde los conductores de las empresas transportistas informaron que decidieron suspender la protesta, porque les habían prometido calibrar las máquinas, no obstante que los técnicos que arribaron para revisarlas dijeron que no tenían reparación permanente.
Algunos de los choferes, empezaron a entregar el producto, por la amenaza de sus empresas de que serían despedidos y boletinados, ya que los jefes argumentaron que de continuar con el paro, usarían pipas del Ejército para transportar el combustible.