Investigadora imparte conferencia en UAEM.
El control social entre pares es una estrategia para frenar la violencia de género en las universidades, donde el hombre está llamado a frenar a sus compañeros abusivos, que de diferentes formas violentan a las mujeres, dijo Daniela Francisca Cerva Cerna, investigadora y especialista en políticas públicas de género de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
Durante la conferencia “La perspectiva de género en las universidades”, la académica señaló que las universidades están obligadas a integrar en sus normas perspectivas de género para frenar la violencia al interior de las mismas.
En el auditorio del Instituto de Investigaciones en Humanidades de la UAEM, Daniela Cerva presentó los resultados de una investigación que realizó desde hace ocho años en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en la que construye una radiografía sobre cómo se vive la desigualdad.
Sostuvo que la violencia se define en función de los contextos de la relación de la autoridad con los estudiantes o trabajadores de las universidades, porque se presenta en lo general por una relación de poder y sexista que se ve reflejada en estereotipos como, por ejemplo, que en la mayoría de imágenes predomina el varón.
Afirmó que persisten estructuras con ambientes hostiles de poder que generan violencia no explícita, donde la mujer prefiere retirarse sin denunciar porque aún pasa que se sospecha si es verdad lo que dice que vivió, al señalar que aún cuesta trabajo a las mujeres reaccionar.
En su conferencia, la investigadora de origen chileno aseveró que el papel de víctima todavía es complejo, porque el rol que a la mujer le toca jugar es humillante y también se le carga toda la responsabilidad para denunciar y probar.
Dijo que no obstante tener protocolos para atender violencia en universidades, existe una simulación para atender las quejas y denuncias: “no se atienden porque existe interés detrás de las decisiones, es una política pública decidir no actuar contra el fenómeno”.