La crisis económica y social provocada por la contingencia por el covid-19 se ha agudizado no sólo en Morelos, sino en el país, por lo que la atracción de inversiones permitiría un respiro no sólo para los gobiernos, sino para la sociedad que padece la falta de empleo y desarrollo para sus comunidades.
En medio de esa situación tan crítica, empresas como Esperanza Silver ofrecen una alternativa de desarrollo para la comunidad de Tetlama, ubicada en el municipio de Temixco, con una inversión estimada de 450 millones de dólares.
La pandemia trajo consigo el confinamiento social y la parálisis económica y a su vez ha provocado escenarios de recesión, desempleo, cierre de empresas y la aplicación de protocolos de seguridad sanitaria para todos, tema que fue analizado en el foro virtual “Reactivación de la Minería ante la Nueva Normalidad”, donde varios de los protagonistas del sector describieron en qué circunstancias se encuentran para desarrollar sus actividades. Estuvieron empresarios, funcionarios federales como las secretarías de Economía y del Trabajo, además de gobernadores, funcionarios estatales, ambientalistas, trabajadores y líderes de sindicatos.
Se habló de que la minería es una herramienta esencial para la reactivación económica, la generación de divisas, empleo, tejido social y desarrollo social en regiones donde no lo hay. Se abordó como reto y compromiso el fortalecer la protección ambiental con desarrollos mineros sustentables, con la finalidad de que no sólo se trate de una actividad netamente económica y de explotación de recursos naturales no renovables, sino que se le pueda entender como una actividad necesaria para el funcionamiento de la industria en su conjunto.
También señalaron que las empresas mineras trabajan en la actualidad en proyectos sustentables y amigables para el medio ambiente, evitando afectaciones y beneficiando a las comunidades, pero sobre todo de los beneficios que se otorgan a través del Fondo Minero creado en 2014 para devolver a los estados y municipios mineros del país una parte de las contribuciones que pagan las empresas por la extracción , recursos que aún no han podido aterrizar en Morelos y sí en otras 19 entidades más en donde se ha permitido la inversión minera.