Conductores de plataformas protestan contra la inseguridad y para exigir mejores tarifas.
Ángel García, quien trabaja como conductor de Uber y Didi, se sumó a la caravana que realizaron sus compañeros para exigir a las autoridades más seguridad porque, dijo, “salimos de la casa, pero no sabemos si vamos a regresar”.
Ayer los conductores que prestan el servicio de transporte por medio de las aplicaciones de teléfono de Uber y Didi realizaron una caravana al centro de Cuernavaca en demanda de seguridad, ajuste en las tarifas y filtros más estrictos para los usuarios.
Los choferes se concentraron en la avenida Emiliano Zapata a la altura de la Paloma de la Paz, bajaron al centro de la ciudad y posteriormente se trasladaron a las oficinas de las empresas, ubicadas en avenida Díaz Ordaz y Domingo Diez, respectivamente, para entregar un pliego petitorio.
Su principal inconformidad es que la violencia contra este gremio se ha incrementado con la pandemia del covid-19 y al día registran hasta tres robos de vehículos. Sin embargo, no cuentan con el respaldo de las empresas y menos de las aseguradoras.
“Hay denuncias por el robo de vehículos, pero todo lleva un procedimiento, las autoridades se tardan hasta un año para dar respuesta y la empresa no apoya en estos casos. Por ejemplo, en el caso de Didi cuando reportas un robo te dicen que no tienen registro del viaje, que lo sienten mucho, pero por el momento no aparece el viaje en la plataforma”, narró Ángel.
Además, denunció que los asaltantes se hacen pasar por clientes, para lo cual crean cuentas falsas para cometer los ilícitos, lo cual pueden hacer porque la plataforma no es estricta al momento del registro.
El entrevistado refirió que en caso de no ser atendidos por las empresas analizarán otras medidas de protesta, como el paro de labores.